En el marco de esquemas especiales de acompañamiento comunitario, la Unidad para las Víctimas está mejorando la infraestructura social de varias veredas localizadas en la zona del Catatumbo, en Norte de Santander.

La Unidad para las Víctimas llegó hasta tres poblados del Catatumbo, en Norte de Santander, para entregar mobiliario escolar a escuelas donde se educan más de 200 menores de edad de la región, algunos en calidad de internados.

En la vereda Piedecuesta, municipio de Convención, la entidad entregó muebles para el salón comunal y el restaurante escolar, y en la vereda La Trinidad, de la misma población, entregó dotación para el centro educativo rural, el restaurante y el internado.

En la comunidad de Guamal, Ábrego, fueron amoblados el centro educativo y el restaurante escolar. Entre el mobiliario está una estufa de cuatro puestos con parrilla de hierro, mueble y entrepaño de acero inoxidable, comedores de seis puestos con sus respectivas sillas y ventiladores.

Igualmente, esta escuela recibió tableros acrílicos, pupitres unipersonales, bibliotecas, escritorios sencillos para trabajo de los docentes, camarotes con colchonetas, archivadores de cuatro entrepaños.

En cada poblado la comunidad salió a recibir el equipo, manifestando que por fin podían reemplazar los muebles viejos y obsoletos que desde hace tiempo querían cambiar porque eran incómodos para los estudiantes.

“Yo tengo 49 años, siempre he vivido aquí y quiero que mis hijos vivan aquí, que se eduquen aquí. En el 2003 me desplacé con 165 familias, pero luego regresamos. Ahora me alegra que la Unidad entre a La Trinidad con las obras que siempre quisimos”, dijo un líder de la vereda y del Catatumbo.

Luis Fernando Lizcano, profesional del proceso de retornos y reubicaciones de la Unidad en la provincia de Ocaña, explicó que en el marco de esquemas especiales de acompañamiento de tipo comunitario, en los próximos días se entregarán materiales de construcción en las veredas Vista Hermosa (San Calixto), Bijagual y El Juncal (Teorama) y Balcones (Convención), para construir obras como polideportivos, mejoramiento de escuelas y construcción de salones comunales.

Estas obras de mejoramiento de infraestructura social y comunitaria de los poblados afectados por el conflicto armado interno del país, contribuye a que se recupere el tejido social y las personas las personas vuelvan a sentir optimismo y esperanza.