Durante dos días, diversas entidades del Estado, reunidas en Comité de Justicia Transicional, determinaron acciones a seguir en desarrollo de sentencias de restitución de tierras que favorecen a las comunidades indígenas Inga Selva de Putumayo y Siona Tenteyá, víctimas del conflicto armado.

Iniciar la formulación de los planes de reubicación de la comunidad Salve del Putumayo y de retorno de la Siona Tenteyá, así como realizar un acercamiento de dichas poblaciones con las entidades estatales relacionadas con esos procesos, fueron decisiones tomadas en el Comité de Justicia Transicional que durante dos días (13 y 14 de marzo) se llevó a cabo en la Casa Indígena del municipio de Orito, Putumayo.

En el Comité también se validó el principio de seguridad, con lo cual se considera que están dadas las condiciones para el retorno y la reubicación.

El alcalde municipal, Manuel Eduardo Ocoró, lideró la reunión en la que participaron diversas instituciones que tienen relación directa con el cumplimiento de las sentencias de restitución de tierras que contribuyen a la reparación integral de estas comunidades que fueron víctimas del conflicto armado en la región.

Estuvieron en el Comité representantes de las autoridades indígenas de las dos comunidades y de instituciones como la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, la Unidad de Restitución de Tierras, la Agencia Nacional de Tierras, la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría judicial de restitución de tierras, las secretarias de salud y educación departamental y el Ministerio del Interior.

En la reunión, cuyo objetivo fue dar el primer paso a la intervención en el marco de las sentencias de restitución de tierras para estas comunidades, funcionarios de la Unidad para las Victimas socializaron el Protocolo de Retorno y Reubicación, la ruta de reparación integral colectiva y el decreto 4633 de 2011 -que establece medidas específicas de asistencia, atención, reparación integral y restitución de derechos territoriales para las comunidades y grupos indígenas-.

El acercamiento comunitario con las instituciones que tienen responsabilidad en el cumplimiento de las órdenes de las sentencias tiene como fin coordinar de manera concertada un cronograma de trabajo.

Según se acordó, el cronograma de trabajo con la comunidad Selvas del Putumayo se realizará en la escuela del barrio Naranjito de Orito, ubicada en el casco urbano, ya que esta población ahora reside en varios barrios dispersos por el municipio.

El departamento de Putumayo fue afectado por la presencia de grupos armados ilegales, especialmente entre 1980 y la primera década de este siglo, puesto que su

territorio selvático fue propicio para la movilidad de esos grupos, así como el acceso fluvial por los ríos Putumayo, Guamuez y San Miguel, que facilitaron el transporte de insumos y mercancías ilegales.

La zona más afectada fue el bajo Putumayo, al sur, que se convirtió en corredor de movilidad entre Putumayo, Caquetá, Meta, Amazonas y el país fronterizo Ecuador.

El municipio petrolero de Orito queda al sur del departamento y estuvo inmerso en la disputa territorial entre grupos armados ilegales de la época como la entonces guerrilla de las Farc y los paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), además de varias bandas emergentes.

La disputa violenta por el territorio causo muerte, miedo, desplazamientos, entre muchas otras consecuencias que afectaron a todos los habitantes de la región, entre ellos, a las comunidades indígenas que ahora retornan a sus tierras o se reubican en otras áreas.