Mayo
22
2019

Sesiones de recuperación emocional para víctimas mayores de 60 años en el Eje Cafetero

A través de su componente psicosocial, la Unidad para las Víctimas adelanta la estrategia de fortalecimiento desde el enfoque de derechos, con el fin de facilitar el proceso de recuperación emocional de las víctimas residentes en los departamentos de Caldas, Risaralda y Quindío.

RisaraldaPereira

Un total de 66 víctimas del conflicto armado hacen parte de la estrategia de fortalecimiento con enfoque de derechos que adelanta la Unidad para las Víctimas, a través de sesiones de implementación psicosocial en todo el territorio nacional. Las acciones van dirigidas a grupos de sobrevivientes mayores de 60 años.

A través de este programa, la entidad fortalece las capacidades en la población adulta que padeció los episodios de la guerra y que aún siguen luchando contra los recuerdos y las heridas que no les permiten tener una mejor calidad de vida.

“Más allá de la reparación económica a la cual las víctimas tienen derecho, es fundamental que puedan acceder a las diversas actividades que adelantamos desde la atención psicosocial. De nada sirve tener los bolsillos llenos y las heridas abiertas en el alma, por eso con estas acciones grupales e individuales estamos tratando de sanar y mejorar sus condiciones de vida para que puedan proyectarse como parte activa de la ciudadanía”, comentó Laura Moreno, directora territorial.

Esta estrategia hace parte de la medida de satisfacción y garantías de no repetición, y se complementa con el componente de la adecuada inversión de los recursos con un enfoque psicosocial, proyectado a personas víctimas que ya surtieron el proceso de documentación y se validó su derecho a la indemnización administrativa, todo con el fin de posibilitar el cierre de ciclo del proceso de reparación.

Esta acción está compuesta por tres encuentros, los cuales se identifican de la siguiente manera: "Las raíces de nuestro pasado", "El presente que nos sostiene" y "El futuro que puedo construir".

“La realidad que vivimos las víctimas en el territorio amerita este tipo de espacios. Es un deber de la Unidad y del Estado en reconocimiento de la afectación que nos dejó la guerra. Con estos talleres podemos sacar el dolor que llevamos dentro y la Unidad nos da aliciente para poder seguir adelante con nuestras vidas”, dijo Enrique Castillo, uno de los beneficiarios de la jornada.

Las sesiones comenzaron al mismo tiempo en las ciudades de Manizales, Pereira y Armenia. Una vez culminen los tres encuentros, se dará lugar a una nueva convocatoria para continuar adelantando la recuperación emocional de las víctimas en el territorio.

(FIN/EHB/DFM/LMY)