Un total de 150 adolescentes víctimas del conflicto armado que habitan en los departamentos de Quindío, Caldas y Risaralda, participaron durante cuatro días de la quinta sesión de estrategia psicosocial virtual “Proyectándonos”.

Las profesionales del área psicosocial de la Unidad en el Eje Cafetero continúan desarrollando estrategias psicosociales virtuales para atender a la población víctima adolescente entre los 13 y los 17 años. 

Durante la presente semana se cumple la quinta versión de los encuentros, “Fortaleciendo capacidades desde el enfoque de derechos- Proyectándonos”.   

La iniciativa en la cual se han dado cita jóvenes de Manizales, La Dorada, Armenia y Pereira, aporta a la construcción de un sentido reparador y transformador de los recursos de indemnización que tienen destinados, contribuyendo al fortalecimiento de sus proyectos de vida, a través de esta medida de satisfacción.   

Los encuentros se cumplen a partir de cuatro jornadas de trabajo, fortaleciendo el empoderamiento por medio del reconocimiento de sus derechos humanos como sujetos de especial protección y brindando herramientas que aporten al desarrollo de proyectos de vida dignificantes.  

“A pesar de la pandemia en la Unidad el trabajo no para, hemos venido implementando esta estrategia ya con un número de beneficiarios que llega a 150, con una buena aceptación por parte de los directamente implicados y sus familias, la participación ha sido muy activa y los adolescentes se han mostrado receptivos a las temáticas tratadas. De igual manera a partir de la próxima semana iniciaremos CRE-SER que va orientado a niños más pequeños entre los 10 y 12 años”, aseguró Laura Moreno, directora territorial de la entidad en esta zona del país.   

El programa Proyectándonos se lleva a cabo en cuatro momentos: el primero de ellos denominado Raíces de nuestro pasado, el segundo El presente que nos sostiene, el tercero y cuarto basados en El futuro que puedo Construir. Durante el desarrollo de la estrategia los participantes lograron sacar a flote sus temores por lo que tuvieron que vivir junto a sus familias por culpa del conflicto, y visualizar sus proyectos de vida.   

 (Fin/EHB/CMC/LMY)