Nov
18
2019

Las víctimas de Bojayá descansan en paz

Sobre las 9 de la mañana, inició el último día de los actos fúnebres y el entierro final de las víctimas de la masacre de Bojayá.

ChocóBojayá

Con una lectura de los nombres de cada una de las personas que murieron en la masacre de Bojayá y con una oración por la paz y los niños, comenzó este lunes, el acto ecuménico con el que se dio paso al entierro final de las víctimas del 2 mayo del año 2002.

Este ceremonial estuvo cargado de solemnidad y muchos sentimientos que brotaron a medida que iba avanzado el acto. Se le rindió un homenaje al padre Jorge Luis Mazo, quien fue asesinado hace 20 años por los paramilitares cuando se desempeñaba como párroco en el corregimiento Bellavista, de Bojayá (Chocó), en 1999.

Más de 300 bojayaseños se dieron cita en el coliseo del municipio ribereño del río Atrato, con camisetas blancas con mensajes como “vivieron y dejaron sus huellas”, cintas negras, banderas blancas y con las velas encendidas para honrar y despedir los más de 100 cofres que llegaron el pasado 11 de noviembre.

Los últimos pasos

Con un fuerte aplauso y lágrimas de los familiares de los muertos de Bojayá, cerca del mediodía, bajo el sol y guiados por el cristo mutilado, comenzaron a salir uno a uno, cargados por sus familiares, los cofres con los cuerpos de los padres, madres, hermanos, hermanas, tíos, tías, vecinos y amigos que murieron por culpa de la guerra.

Este 18 de noviembre, después de 17 años, los bojayaseños pudieron, en medio de alabaos, expresiones culturales y lágrimas, cerrar un ciclo. “Si descansan los muertos, también descansaremos los vivos”, así lo dijo el padre Antún Ramos quien fue testigo viviente de ese 2 de mayo de 2002.

El director de la Unidad para las Víctimas, Ramón Rodríguez, quien fue delegado por el gobierno para acompañar los actos de entrega, velación y entierro de las víctimas de la masacre de Bojayá dijo al hacer el balance de la jornada que "Hoy estamos cerrando un capítulo de varios años, es el entierro final de estas víctimas, de un hecho que nunca debió haber sucedido. Desde la Unidad para las Víctimas, junto con otras entidades del gobierno nacional, hemos acompañado desde psicosocial al Comité de las Víctimas de Bojayá en las exhumaciones y seguimos trabajando con ellos en la defensa de sus derechos.  Para este evento fue fundamental su coordinación y apoyo".

Agregó que el proceso de entrega de los cuerpos plenamente identificados y en la organización del evento está reflejado el trabajo de otras entidades como la Fiscalía, Medicina Legal y el Centro de Memoria Histórica y agregó que, "ayer se logró un paso importante al hacer un llamado a Sistema de Verdad, Justicia y Reparación y Garantías de No Repetición para avanzar en el proceso de los que aún siguen desaparecidos y que no sabemos dónde están".

Aseguró que el compromiso es seguir trabajando con los tres sujetos de reparación colectiva, dos en implementación y uno en formulación y protocolización y con el acompañamiento a la comunidad en el marco de la ley 1448 de 2011.

(Fin/DFM/LMY)