Este fin de semana se dio en Calima-El Darién el acto de cierre de la Estrategia de Recuperación Emocional de Mujeres Víctimas de Delitos contra la Integridad y la Libertad Sexual en medio del Conflicto.

En un paraje natural rodeado por las montañas vallecaucanas y el imponente Lago Calima, se realizó el acto de cierre de la Estrategia de Recuperación Emocional de Mujeres Víctimas de Delitos Contra la Integridad y la Libertad Sexual en medio del Conflicto. 25 damas de distintos lugares del departamento, quienes padecieron una de las afectaciones más crudas en medio de la guerra, dieron por terminada su participación en este ciclo de terapia grupal, haciendo parte de un acto simbólico definido por ellas mismas.

Con velas encendidas elaboraron en el suelo la silueta de una mujer, representando con ello la luz y lo sagrado de sus cuerpos.  Además, hicieron quemas simbólicas de mensajes de todo aquello que quieren que quede en el pasado y sembraron un árbol en señal de un nuevo comienzo.

“Este ha sido un proceso muy duro, pero sanador, en el que hemos escuchado los dramas y dolores de otras mujeres que han sufrido lo que nosotras también vivimos. La verdadera reparación llega cuando nuestro corazón comienza a liberarse y a descargar todas esas tristezas. Yo puedo decir que aunque recordar me duele, mi alma ha ido sanando”, indico Norleida Largo, quien hizo parte de esta estrategia de recuperación.

Fabiola Perdomo Estrada, directora territorial de la Unidad para las Víctimas en el Valle del Cauca, explicó que esta estrategia se compone de tres encuentros, cada uno de dos días, en los cuales las mujeres trabajan de manera grupal buscando la recuperación emocional.

“Con este grupo los encuentros anteriores los tuvimos en Cali, en el Hotel La Luna.  Algunas de estas valientes mujeres comparten allí relatos que no han exteriorizado siquiera con sus familiares y se sienten rodeadas de la comprensión y el afecto de otras víctimas como ellas”, indicó la funcionaria.

De acuerdo con cifras de la Unidad para las Víctimas, en el Valle del Cauca 896 mujeres indicaron en su registro haber sido víctimas de violencia sexual en medio del conflicto armado.