Con esta medida de reparación integral, se busca fortalecer el proyecto de vida de las víctimas del conflicto. El total de la compensación económica entregada superó los $1.200 millones.

En el coliseo del Instituto Tecnológico del Putumayo, la Unidad para las Víctimas convocó a 221 sobrevivientes del conflicto armado de todo el departamento, quienes recibieron cartas de indemnización como medida de reparación integral por los hechos victimizantes sufridos.

Blanca Tapia, víctima de desplazamiento forzado, fue una de ellas. Está inscrita en el Registro Único de Víctimas (RUV) desde el 2002 y recibió con sorpresa la llamada. “Sentí asombro y pues me gustaría hacerlo efectivo en los gastos de la casa, pues tengo una propiedad que también me dio el Estado y quiero hacerle unas mejoras”, afirmó.

Un caso similar fue el vivido por Wilfer Cuello, sobreviviente de desplazamiento, quien reside en el Cauca. Este hombre llegó junto a otros cinco familiares a recibir sus cartas de indemnización. Según comentó, ha sido tal la sorpresa que aún no sabe en que los invertirá, pero le gustaría poder comprar ganado o destinarlos para arreglar la vivienda.

Durante la jornada, los asistentes recibieron asesoría sobre cómo invertir adecuadamente sus recursos y participaron en un acto simbólico que les permitió ‘quemar’ en la hoguera los sentimientos dolorosos y con ello poder liberarse de las cargas emocionales ocasionadas por el conflicto armado.

(Fin/AYP/DRR/LMY)