
En Nariño, justicia transicional entregó 10 restos óseos a sus familiares
Familiares de víctimas de la masacre de El Palmar en Leiva, Nariño, y de otros hechos en Putumayo, y Valle recibieron a sus seres queridos en Pasto y pidieron garantías de no repetición. Aseguran que la muerte los lideres emblemáticos de esta vereda de la zona de cordillera de Nariño debe servir para que se consolide la paz.

El fiscal seccional 227 adscrito a la Dirección de Justicia Transicional Seccional Nariño, Héctor Fabio Vargas, llevó a cabo la diligencia judicial que tuvo lugar en el templo de San Andrés Apóstol de la ciudad de Pasto, donde familiares de 10 víctimas recibieron de forma digna los cuerpos plenamente identificados de sus familiares.
El fiscal indicó que los restos corresponden a cuatro mujeres y seis hombres adultos. También indicó que de estas víctimas dos residían en Putumayo, una del Valle del Cauca y las siete restantes en Nariño.
Entre los restos de las víctimas entregadas en la capital de Nariño, dos de los diez féretros correspondieron a líderes del corregimiento de El Palmar, municipio de Leiva, donde el 29 de diciembre de 2007 grupos armados acabaron con la vida de seis líderes comunitarios.
Nelly Mabel Ordoñez Grijalba, hija de Piedad Dionila Grijalba, una de las líderes asesinadas en el Palmar, destacó que la muerte de su madre debe contribuir a consolidar la paz en Leiva y Nariño: “Mi madre literalmente dio su vida por su pueblo, en la familia sentimos aún mucho dolor por este hecho, pero también mucho orgullo porque el nombre de mi madre después de 10 años después de su fallecimiento, sigue siendo recordado por todo el pueblo, por la comunidad, la gente sigue recordándola como la líder que entregó todo, hasta su vida por velar por la comunidad y por mejorar la vida de las personas de El Palmar. Por eso nos sentimos en la obligación de velar por que las medidas de reparación colectiva en El Palmar se ejecuten de forma transparente y que la muerte de nuestros familiares sirva para que la paz llegue a Leiva”, indicó.
Piden garantías
Los líderes de El Palmar, corregimiento piloto en reparación colectiva en Nariño, coincidieron en afirmar que para que la paz llegue a esta región de Nariño es importante que el Estado y las instituciones brinden garantías de no repetición de lo sucedido. “Nuestro pueblo esta desprotegido y por eso exigimos que las garantías de no repetición se consoliden, que la presencia del estado sea permanente, que garantice la seguridad de la comunidad y se evite que masacres como la sucedida en Leiva vuelva a suceder”.
Las diligencias de entrega de los restos inician con la exhumación de los cuerpos, continúan con los procedimientos científicos de identificación plena y culminan con la entrega en condiciones de dignidad a a los familiares de las víctimas son realizadas por la Fiscalía General de la Nación, el apoyo del CTI Nariño, Policía Nacional, Ejército Nacional, Instituto Nacional de Medicina Legal, Unidad para las Víctimas, Ministerio de Salud y la Gobernación de Nariño a través de la Mesa Departamental de Víctimas. Con esta entrega, en el 2017 se han identificado plenamente y entregado e forma digna 22 personas en Nariño.
“La Fiscalía adelantó los correspondientes estudios forenses en sus laboratorios de identificación especializada y lofoscopía en articulación con el Instituto Nacional de Medicina Legal, logrando la identificación de los restos encontrados. Los hechos en los que perdieron la vida estas personas fueron cometidos por grupos al margen de la Ley como son: las Farc, las AUC y Grupos Armados Organizados en los departamentos de Nariño, Putumayo y Valle del Cauca, entre los años 1996 y 2007”, precisó el Fiscal de la dirección de Justicia Transicional.