En un stand ubicado en la sede administrativa de la Unidad para las Víctimas, se ofrecen los productos fabricados por los sobrevivientes del conflicto armado.

Café, jabones, dulces, bolsos y, hasta libros, son algunos de los productos que los sobrevivientes del conflicto armado exponen en la sede administrativa de la Unidad para las Victimas en Norte de Santander, en el marco del proceso de reparación integral y el fortalecimiento del tejido social y económico en sus nuevas condiciones de vida.

En distintos municipios del departamento, los sobrevivientes del conflicto armado han desarrollado una serie de estrategias productivas que hoy se convierten en sus fuentes de ingreso, sostenimiento y en algunos casos de generación de empleo.

La directora territorial de la Unidad en Norte de Santander y Arauca, Alicia María Rojas Pérez, expresó que se mantiene el apoyo a esta clase de iniciativas: “Es satisfactorio ver cómo este sector de la población le apuesta al cambio, al desarrollo y a la construcción de la paz, a través de estas propuestas que impulsan varios campos económicos de nuestro departamento”.

La consolidación de los proyectos les ha permitido generar asociaciones que fortalecen el sistema productivo y empresarial de la región y posicionan marcas que han sido socializadas en el departamento como experiencias exitosas de organizaciones productivas.

Las muestras fueron enviadas por los productores para participar de esta primera fase; luego serán convocados para socializar los avances en estos procesos.

(Fin/CEG/DRR/LYG)