Abr
24
2017

En el Meta, Unidad para las Víctimas notificó tres veredas como sujeto de reparación colectiva

El municipio de Vista Hermosa, se encuentra localizado a 145 kilómetros de la capital del Meta, cuenta 87 veredas y 25.461 habitantes en el área urbana y rural, de los cuales 10.574 de ellos están inscritos en el Registro Único de Víctimas (RUV).

MetaVistahermosa

La Unidad para la Atención y Reparación Integral a la Víctimas llevó a cabo al acto de notificación como Sujetos de Reparación Colectiva a 79 habitantes de las veredas de Caño Veinte, Guadalito y Puerto Esperanza del municipio de Vista hermosa (Meta).

Este evento se llevó a cabo en la Caseta Comunal de la vereda Caño Veinte y contó con la participación de 45 familias víctimas del conflicto armado y el acompañamiento de la Gobernación del Meta y el Consejo Noruego.

Carlos Arturo Pardo Alezones, director de la Unidad para las Víctimas en la territorial Meta y Llanos Orientales, indicó que estas  personas hacen parte de las  familias que  fueron víctimas de la masacre en la vereda Puerto Esperanza, el 2 de octubre de 2005  y que condujo al desplazamiento forzado de sus habitantes.

El director agregó que también, el 22 de abril de 2010, los habitantes de las tres veredas fueron víctimas de minas antipersona, cuando se encontraban en el centro poblado de la vereda Puerto Esperanza, recibiendo apoyo de alimentación por parte de una entidad del Estado.

Por su parte, Juan Andrés Gómez López, asesor de la secretaría de Víctimas de la Gobernación del Meta, señaló que es de mucha importancia que estas comunidades sean reconocidas como sujetos de reparación colectiva para que la administración departamental pueda apoyar en la ejecución del Plan de reparación Colectiva y que este sea concertado con esta población víctima.

El funcionario también señaló que “se iniciará con la construcción del plan donde se incluirán las medidas de restitución que contienen todo lo relacionado con programas de educación, vivienda, servicios públicos, entre otros beneficios para estas comunidades”.

Así mismo, Luz Dary Pineda, líder de la comunidad en la vereda Caño Veinte aseguró que a pesar de que han transcurrido siete años, las víctimas aún tienen secuelas físicas y psicológicas a causa de los hechos de violencia que tuvieron que vivir por varios años en estas veredas.

“Para la comunidad es muy significativo el apoyo brindado por la Unidad para las Víctimas y esperan continuar contando con el acompañamiento del Estado en todo el proceso que se llevará a cabo en estas veredas” concluyó  Pineda.