
Comunidades indígenas en Urabá y Darién fortalecen centros de conocimiento y formación tradicional
Con la entrega de mobiliario y dotaciones escolares, tres resguardos del pueblo gunadule afianzan la etnoeducación, como medida de restitución del Plan de Reparación colectiva.


En los resguardos de Caimán Bajo, en Necoclí, Caimán Alto, en Turbo (Antioquia) y resguardo Arquía, en Unguía (Chocó), se efectuó la entrega de mobiliario y dotaciones escolares que permitirán fortalecer los espacios donde estas comunidades imparten el conocimiento y los saberes ancestrales a las nuevas generaciones.
Los resguardos recibieron, como medida de restitución, mobiliario escolar consistente en sillas, mesas, tableros, armarios, ventiladores entre otros elementos para las cocinas y el área administrativa.
Estos implementos buscan fortalecer la etnoeducación y las actividades escolares acordes a sus prácticas culturales, tal como lo contempla en el Decreto-Ley 4633 de 2011 “por medio del cual se dictan medidas de asistencia, atención, reparación integral y de restitución de derechos territoriales a las víctimas pertenecientes a los pueblos y comunidades indígenas”.
El pueblo gunadule, asentado en las subregiones de Urabá y Darién, en zona fronteriza con Panamá, ha logrado conservar sus tradiciones y arraigo con la tierra, y espera afianzar los saberes ancestrales en las nuevas generaciones.
Las dotaciones para los tres resguardos gunadules tienen una inversión cercana a los $257 millones, y fueron entregadas a las escuelas de Tiwitikinia Ipitiwuala, en Caimán Bajo; la Institución Educativa Indígena El Mango: sedes Nazario Uribe y Nuevo Ule, de Caimán Alto; y Cuna Yala, de Arquía.
Edgar Ramírez, rector de la institución educativa Cuna Yala, de Arquía, recibió con beneplácito estas entregas. “Esto es un sueño hecho realidad, nos sentimos muy contentos porque podemos apreciar la buena calidad de las dotaciones que recibimos, las cuales serán bien aprovechadas", expresó.
(Fin/CYT/LMY)