A la fecha, esta comunidad de la subregión de los Montes de María ha recibido cerca de 500 millones de pesos en su proceso colectivo.

En el 2000, los saladeros sufrieron, lo que para ellos fue el peor acontecimiento de su historia. Un grupo de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), comandadas por alias “Jorge 40” y alias “Cadena”, irrumpieron en el corregimiento asesinando a alrededor de 60 personas, entre el 16 y el 22 de febrero.

Debido a los hechos ocurridos en el marco del conflicto armado, esta comunidad empezó su camino a la reparación integral en 2012, como un piloto que realizó la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación (CNRR). Desde que fue creada la Unidad para las Víctimas en 2011, se continuó el trabajo de reparación individual y colectiva con los saladeros.

El 8 de septiembre de 2012 y después de la socialización del programa de reparación colectiva, la comunidad aceptó ingresar al programa. El Plan de Reparación Colectiva fue aprobado en octubre del mismo año por parte del Comité Territorial de Justicia transicional, contando con 37 acciones reparadoras enmarcadas en las medidas de: Garantías de No Repetición, Restitución y Satisfacción, con la participación de la comunidad.

Algunas de las medidas implementadas que han contribuido a fortalecer el colectivo fueron la creación de veedurías ciudadanas, creación de proyectos productivos, legalización de predios, fortalecimiento operativo y físico de las juntas de Acción Comunal, y ajuste y mejora del sistema eléctrico, mobiliario, linternas y ventiladores de las escuelas, entre otras.

La Casa de la Cultura y la reconstrucción de los relatos biográficos de las víctimas, como parte de las medidas de satisfacción, permitieron mejorar los procesos culturales de los saladeros y contribuyeron a exaltar a los miembros de la comunidad para superar el estigma social.

Con el fin de recuperar la confianza de la comunidad con el Estado y reconstruir su tejido social, se está implementando la estrategia Entrelazando, la cual lleva ocho jornadas, en un trabajo articulado con el Comité de Impulso y el grupo de tejedores y tejedoras de la comunidad para implementar el Plan Integral de Reparación Colectiva.

Los saladeros creen que, a través de la comunicación, pueden cambiar el imaginario sobre su corregimiento, por eso en un trabajo en conjunto con la Unidad, se está desarrollando una estrategia de comunicaciones, para visibilizar el trabajo comunitario que lleva a cabo el colectivo.

Estas acciones realizadas por la Unidad para las Víctimas y con el apoyo de las diferentes entidades del Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral para las Víctimas (SNARIV), han dado cumplimiento al 40.5 % del Plan integral de Reparación Colectiva (PIRC).

Hasta la fecha, la Unidad ha realizado en el Sujeto de Reparación Colectiva de la Comunidad de El Salado una inversión de más de 480 millones de pesos, logrando implementar cuatro medidas de Garantías de No Repetición, 10 de Restitución y una de Satisfacción.

En Retornos y Reubicaciones, los saladeros recibieron por parte de la Unidad, 12 esquemas de acompañamiento familiar que beneficiaron al mismo número de hogares.

A 2019, la Unidad realizó la entrega de la indemnización administrativa y judicial a más de 480 sobrevivientes con una cifra superior a los 4.300 millones de pesos.

(Fin/JFG/LMY)