Cerca de 2.000 millones de pesos se entregaron este jueves para reparación de víctimas en Santander
Alrededor de 250 personas afectadas por el conflicto armado en Bucaramanga, Floridablanca, Piedecuesta, Girón y San Gil recibieron la compensación económica a la que tienen derecho según la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras.
“No hay dinero que pueda pagar el dolor y la pérdida de un ser querido. Esta indemnización es un apoyo que el gobierno nacional, a través de la Ley de Víctimas, ha querido dar a cada uno de ustedes para que puedan mejorar sus condiciones de vida y hacer realidad muchos de sus proyectos productivos”. Con estas palabras, Luis Alfonso Aparicio Reyes, director territorial de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas en Santander, inició el acto de dignificación y entrega de indemnizaciones que benefició a 250 afectados por el conflicto armado de los municipios de Bucaramanga, Floridablanca, Piedecuesta, Girón y San Gil. El valor total de las compensaciones superó los 2.000 millones de pesos.
El acto, que contó con la presencia del gobernador de Santander, Didier Tavera Amado, se llevó a cabo en el auditorio Augusto Espinosa Valderrama de la Gobernación y estuvo lleno de reflexiones y momentos emotivos. “El compromiso con ustedes es el de no volver a vivir esa historia violenta; este es un trabajo muy importante que viene haciendo la Unidad para las Víctimas a través de la oferta institucional que hoy se está presentando para todos ustedes con las instituciones que se han hecho presentes”, destacó el gobernador del departamento.
Durante la jornada, se llevó a cabo una feria institucional de servicios con la presencia del SENA, Colpensiones, el Banco Agrario, Unidades Tecnológicas de Santander, la Secretaría departamental de Vivienda y el INVISBU. Con esta actividad, los asistentes conocieron la oferta institucional y estudiaron la posibilidad de invertir en proyectos productivos o acceder a una vivienda, entre otras opciones.
“Recibir este recurso da sentimientos encontrados, pero en ningún momento pretendemos pagar por sus seres queridos fallecidos ni por su dolor, sino que queremos hacer efectivo ese derecho que ustedes tienen y que tengan un recurso para poder empezar a dar frutos y que su proyecto de vida sea un poco más fácil de conseguir”, expresó Marietha Amado, psicóloga de la Unidad para las Víctimas.
Con estas palabras pronunciadas en el acto simbólico organizado por la Unidad, llegó uno de los momentos más emotivos del día: todos los presentes participaron en la actividad de “hacer florecer” un árbol sin hojas, como señal de la reconstrucción del proyecto de vida de quienes sobrevivieron a la violencia del conflicto.
“Reconocemos la valentía que cada uno de ustedes ha tenido de no callar, de hablar sobre lo sucedido, para que hoy puedan tener este recurso y esperamos de todo corazón desde la Unidad para las Víctimas que ustedes puedan florecer aún más”, reflexionó la psicóloga Marietha Amado.