La Unidad para las Víctimas llegó al corregimiento de Santana Ramos en Puerto Rico, Caquetá, para participar en una jornada de articulación y oferta institucional con el Instituto de Bienestar Familiar (ICBF) y la Defensoría del Pueblo, entre otras entidades, tras registrase una situación de confinamiento en la zona.

Del 22 al 24 de septiembre, un equipo de la Unidad para las Víctimas se trasladó al corregimiento Santana Ramos de Puerto Rico, Caquetá, donde se entregó ayuda humanitaria inmediata, representada en 360 kits alimentarios y de aseo, a núcleos familiares de la zona.

Lo anterior, como respuesta ante la situación de confinamiento y el seguimiento a la alerta temprana 007 de 2020, reportada por la Defensoría del Pueblo, que da cuenta del riesgo de vulneraciones a los derechos de la población civil por la disputa entre grupos armados que han afectado la seguridad alimentaria y las posibilidades de atención.

“Se atendieron las 27 veredas que conforman el corregimiento Santana Ramos, donde la comunidad quedó satisfecha con la entrega de los mercados que fueron muy completos y se mostraron agradecidos con la presencia de la Unidad para las Víctimas y las demás entidades del orden municipal y departamental, brindando atención y haciendo presencia en el territorio”, aseguró el defensor del pueblo en Caquetá, Edwin Fabián Leal Hernández.

El defensor del pueblo anunció que está pendiente la entrada a la zona de una brigada de salud y de algunas organizaciones internacionales (ONGs) para una nueva entrega de alimentos.

En la misión participaron la Unidad para las Víctimas, Defensoría del Pueblo regional Caquetá, la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia (Mapp OEA), el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y representantes de los gobiernos departamental y municipal.

El corregimiento de Santana Ramos es catalogado como zona de reserva forestal, está habitado por comunidades campesinas dedicadas a la agricultura y ganadería; sin embargo, las difíciles condiciones de acceso a la zona, pues solo se puede a través de una trocha que comunica con el municipio de Algeciras, Huila, han prolongado la presencia de estructuras armadas organizadas para el desarrollo de economías ilegales, la marginalidad y la desconexión con el interior del país.

En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.