Dic
21
2021

Familias embera que estaban en Bogotá pasarán Navidad en sus territorios ancestrales

La Unidad para las Víctimas y la Alcaldía Mayor de Bogotá tuvieron a cargo el retorno voluntario de 215 familias emberá que se encontraban en el parque La Florida, en Bogotá, a los departamentos de Risaralda y Chocó.

Bogotá, D.C.Bogotá, D.C.

Tras permanecer algunos más de un año en Bogotá, en medio de difíciles condiciones climáticas, de salud y sociales, 750 indígenas embera oriundos de los departamentos de Risaralda y Chocó retornaron a sus territorios ancestrales con el apoyo y acompañamiento de la Unidad para las Víctimas y la administración de la capital del país. 

Las 215 familias que se encontraban en el parque La Florida fueron trasladadas en 20 buses hasta el punto de desembarque en el resguardo Gitó Dokabú, en Pueblo Rico, en donde, a lomo de mula, emprendieron su trayecto final algunos en territorio risaraldense y otros hasta el municipio de Bagadó, en el Chocó. 

“Fruto de la concertación con la comunidad embera que estaba en el parque La Florida regresaron a su territorio 215 familias pertenecientes a los departamentos Risaralda y Chocó. Estas personas tienen todas las garantías de seguridad, voluntariedad y dignidad para reunirse con familiares y amigos en sus resguardos. Esto se logra gracias al esfuerzo interinstitucional mediante el cual lograremos mejorar su calidad de vida”, comentó al respecto el director general de la Unidad, Ramón Rodríguez Andrade. 

A las familias les fueron entregadas ayudas humanitarias en dinero, además de mercados, auxilio de transporte y kits de herramientas y hábitat.

“Adelantamos la segunda fase de este retorno con total éxito, garantizamos la entrega de sus enseres y ayudas en especie y en dinero. Queremos que estas familias permanezcan en sus resguardos. Esto es un trabajo en equipo de nuestro director general Ramón Rodríguez y otras entidades del orden nacional y territorial”, expresó Luis Alberto Donoso, director territorial de la Unidad en el Eje Cafetero.  

Entidades como la Policía Nacional, la Cruz Roja, la Defensoría del Pueblo, el ICBF, las gobernaciones de Risaralda y Chocó, las alcaldías de Pueblo Rico y Bagadó, y todas las autoridades, gobernadores y guardia indígena de los resguardos receptores también hicieron parte de este operativo.

Julio Nayazá gobernador indígena del resguardo unificado dijo: “queremos agradecerle a la Unidad para las Víctimas por el compromiso que ha tenido para traer de nuevo a nuestros hermanos a su comunidad ancestral, esperamos que este sea uno de los últimos procesos de retorno que veamos porque no queremos que nuestros indígenas se vayan a las ciudades a aguantar frío y hambre, por eso pretendemos que se respeten los pactos y nos cumplan con todo lo acordado sobre todo en materia de proyectos agrícolas para garantizar nuestra supervivencia”.

“Desde la Personería de Pueblo Rico estamos aunando esfuerzos entre todas las entidades para que estos emberas lleguen de nuevo a su seno familiar y se les respeten sus derechos como comunidad de especial protección. El llamado es a que se mantengan en sus tierras y hagan respetar sus creencias y cosmovisión”, dijo Danilo Mejía, personero del municipio receptor. 

En las fases 1 y 2 de este retorno la Unidad ha desembolsado $ 1.500 millones aproximadamente, además del transporte que ha facilitado el Distrito Capital, así como el apoyo de los entes territoriales de Pueblo Rico y Bagadó, entre otros.

Las familias que llegan a Risaralda estarán en los territorios de La Palmita, Quemberdé, Vichupara, Bajo Embordó, Dokabú.

(EHB/COG)