Los materiales se los entregó la Unidad para las Víctimas, en el marco del proceso del Esquema Especial de Acompañamiento a Familias, que incluye un proyecto productivo para su estabilización socioeconómica.

Con la entrega de 22 implementos para lavar, cortar y arreglar cabellos, y hacer manicura y pedicura, Blanca Nieves Pérez Sarmiento, una víctima por desplazamiento forzado y despojo de tierra, abrirá un salón de belleza en un barrio de Cúcuta en los próximos días.

Previo a la entrega del equipo, Blanca Nieves se preparó tomando varios cursos de peluquería y maquillaje que el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) ha dictado este año en el Centro Regional de Atención a las Víctimas de Atalaya.

“Yo estoy lista, incluso aún no he acomodado el salón, pero ya le hice el corte de cabello a mi hijo”, reveló la beneficiada a las profesionales Noralba Rodríguez y Xiomara Gamboa, del proceso de retorno y reubicación de la territorial, quienes le hacen acompañamiento en esta etapa de su reparación.

En cajas todavía permanecen los secadores, planchas profesionales para alisar cabellos, la mayoría de las tijeras para corte entresecado y de precisión y la máquina cortapelo de hombre. Con plástico de protección también siguen el spa para los pies, la lavacabeza y las sillas de peluquería para niños y adultos. La formalización del centro de belleza está pendiente de la remodelación de un área de la casa donde vive para dedicarla solo a sus clientes.

Los materiales se los entregó la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, en el marco del proceso del Esquema Especial de Acompañamiento a Familias, que incluye la entrega de insumos para que organice un proyecto productivo que le otorgue estabilidad socioeconómica.

Blanca Nieves es una madre cabeza de familia responsable de su progenitora y seis hijos. En 1996 un grupo de hombres que se identificaron como guerrilleros la obligaron a dejar su casa localizada en el barrio Antonia Santos de Cúcuta.

Aunque al principio no denunció y dejó la ciudad para vivir en Bogotá, cuando se decidió a contar los hechos fue incluida en el Registro Único de Víctimas. Hoy, además de contar con todo el equipo para organizar su salón de belleza, espera el cumplimiento de una sentencia del juzgado Primero Civil del Circuito Especializado en Restitución de Tierra que le dará propiedad sobre la casa que habita actualmente.

Ella habló con su dueño actual, le contó que ya tiene sentencia y sólo falta el desembolso. Mientras éste llega, le paga arriendo. Con el sueño de su nueva casa y su salón de belleza, Blanca Nieves deja atrás el dolor que le causaron los grupos armados ilegales, para empezar una nueva vida.