Feb
22
2019

La Fundación Conviventia y la Unidad articulan esfuerzos por las víctimas

Missy Christie de Acosta, presidenta de Conviventia, quien fue reconocida como mujer Cafam en el año 2002, expresó al director de la Unidad para las Víctimas, Ramón Rodríguez, el deseo de trabajar con la entidad por las personas afectadas con el conflicto armado.

Bogotá, D.C.Bogotá, D.C.

Trabajar especialmente en los procesos de reparación colectiva, de forma articulada, fue la sugerencia que hizo el director de la Unidad para las Víctimas, Ramón Rodríguez Andrade, a la presidenta de la fundación Conviventia, Missy Christie de Acosta, quien a su vez puso a disposición de la entidad la capacidad de trabajo de su organización.

“Revisamos el trabajo que Conviventia ha venido haciendo con víctimas, sabemos que en Soacha han hecho un buen trabajo encaminado por la fe cristiana y los valores. Me parece que tenemos que apoyarnos, lo que buscamos es que Conviventia pueda entrar a trabajar en los sujetos de reparación colectiva y también en la ruta de reparación en general, en los temas que identifique con el grupo de trabajo del área de cooperación internacional”, afirmó Ramón Rodríguez al término de la reunión.

La presidenta de Conviventia presentó al director de la Unidad y al coordinador de cooperación internacional de la entidad, Nicolás Fernández de Soto, las líneas de trabajo de la fundación y algunos resultados obtenidos.

Conviventia nació en 1992, se constituye como fundación en 1996, tiene sede en Houston, Estados Unidos, y una orientación cristiana. Desde hace varios años trabaja en Colombia en zonas donde habitan víctimas del conflicto.

Al año atienden cerca de 10 mil personas en programas de Infancia y Juventud, Colegios, Fortalecimiento familiar y Generación de ingresos, entre otros, y cerca de 12 mil personas reciben asistencia humanitaria. Mueven al año cerca de $8.000 millones de pesos, de los cuales alrededor de $5.500 son de cooperación internacional.

En Colombia, la fundación ha trabajado en la localidad Ciudad Bolívar y el barrio Las Cruces de Bogotá, en el barrio Las Américas de Barranquilla, El Pozón en Cartagena y Altos de Cazucá en Soacha.

“Somos conscientes de que estamos viviendo un momento clave e histórico en el país y la inversión que se haga en la reparación efectiva de las víctimas va a determinar muchísimo las perspectivas de buen futuro tanto para ellos como para nosotros como sociedad. Nuestra organización viene trabajando con víctimas desde hace muchos años desde el sector privado y social y que mejor que aliarnos con la Unidad, que tiene el mandato de trabajar por ellos, para poder unir la experiencia y potencializar las capacidades para así lograr un mayor impacto”, expresó Missy Christie de Acosta.