
Colombia compartirá con otros países su experiencia en atención psicosocial y acompañamiento de retorno a víctimas
Según explicó Alan Jara, director de la Unidad para las Víctimas, dos casos exitosos desarrollados en Santander y Bolívar harán parte del portafolio de buenas prácticas que Colombia dará a conocer a otros países a través de la iniciativa ‘Saber Hacer Colombia: Paz’, liderada por APC-Colombia.



La atención psicosocial en los procesos de reparación colectiva a víctimas y los proyectos implementados en los retornos y reubicaciones de familias desplazadas son dos de las 20 experiencias seleccionadas por ‘Saber Hacer Colombia: Paz’, una iniciativa de la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional (APC-Colombia) que recoge ejemplos exitosos sobre los que compartir buenas prácticas con otros países del mundo.
Ambas experiencias, lideradas por la Unidad para las Víctimas, fueron presentadas este miércoles por el director de la entidad, Alan Jara, en un encuentro organizado por APC-Colombia en el norte de Bogotá, donde también estuvieron cooperantes internacionales y otras entidades colombianas.
“La afectación del conflicto va mucho más allá de la afectación individual”, recordó Alan Jara. En este sentido, la estrategia de reconstrucción del tejido social denominada ‘Entrelazando’, que se llevó a cabo en Simacota (Santander), sirve para mostrar la importancia de la atención psicosocial en la recuperación de confianza al interior de comunidades golpeadas por la violencia.
La segunda experiencia seleccionada es la que se llevó a cabo en San Pablo (Bolívar), con los esquemas especiales de acompañamiento en el proceso de retornos y reubicaciones, denominados ‘Proyectos dinamizadores’. “Ambas acciones son más que pertinentes en este momento histórico”, afirmó Jara, ya que con esta iniciativa se espera “su documentación como casos pilotos que permitan apropiarlos no solamente en nuestro país sino también compartirlos con la comunidad internacional”.
“Para la Unidad es importante formar parte de este portafolio de buenas experiencias técnicas”, agregó Alan Jara, dado que “se trata de una oportunidad para visibilizar a los ocho millones de víctimas en el mundo”.
Por su parte, Alejandro Gamboa, director de APC-Colombia, reivindicó la conveniencia de “enraizar la construcción de paz en el desarrollo económico”, de adoptar enfoques diferenciales que tengan en cuenta el importante papel de las mujeres y los jóvenes y recordó la relevancia de los programas de reparaciones colectiva e individual como una oportunidad de crecimiento “desde la óptica de desarrollo”.
Para finalizar, Alan Jara se refirió a otras experiencias relevantes que ameritan ser conocidas a nivel internacional, tales como “la medición de la condición de vulnerabilidad en las víctimas de desplazamiento” y “la participación de las víctimas en la construcción de la política pública” que les atañe. Por último, el director de la Unidad para las Víctimas aseguró que “la reparación colectiva es una de las máximas apuestas en la construcción de paz”.