Nov
04
2020

Diálogo virtual examinó documento sobre satisfacción de derechos de las víctimas en el exterior

Durante su intervención el director general de la Unidad dijo que "lo más importante de este evento es poder darles a conocer a las víctimas este documento y mostrar cómo desde las diferentes alianzas con cooperantes internacionales podemos conseguir un impacto para poder atender a las víctimas connacionales”.

Bogotá, D.C.Bogotá, D.C.

Con éxito se realizó de manera virtual la presentación de las conclusiones del documento Ley 1448 de 2011: miradas sobre la satisfacción de los derechos de las víctimas en el exterior, escrito elaborado por la Unidad para las Víctimas y la organización Consejo Noruego de Refugiados.   

El evento fue instalado por el director general de la Unidad para las Víctimas, Ramón Rodríguez, por la jefe de operaciones de Consejo Noruego para Refugiados, Luz Yadira Galeano, y por una de las representantes de las víctimas en el exterior ante la Mesa Nacional de Participación Efectiva de las Víctimas, Norela Coronado.   

Durante su intervención Ramón Rodríguez dijo que "lo más importante de este evento es poder darles a conocer a las víctimas este documento y mostrar cómo desde las diferentes alianzas con cooperantes internacionales podemos conseguir un impacto para poder atender a las víctimas connacionales”.  

Por su parte, Luz Yadira Galeano aseguró que "quiero resaltar que este esfuerzo conjunto con la Unidad para las Víctimas es el resultado de nuestro trabajo directo con la población víctima en el exterior durante los últimos años y por lo tanto busca representar la voz de esas personas que muchas veces no son escuchadas”.  

Mientras que Norela Coronado, resaltó la importancia del documento y pidió “retomar el proyecto de mesa de víctimas en el exterior y que en la página de cada consulado exista un espacio de diálogo con los dos representantes ante la mesa nacional”.  

La presentación del documento estuvo a cargo de Óscar Rico, coordinador del Grupo de Atención a Víctimas en el Exterior de la Unidad para las Víctimas quien expresó que "la idea fue construir un documento objetivo en el que se reflejen diferentes perspectivas y elementos técnicos y datos cuantitativos y cualitativos que buscan mostrar lo que ha sido la implementación de la política pública de víctimas en el exterior”.  

Pilar Riaño-Alcalá, profesora residente en Canadá, abordó el tema "Exilio y migración forzada: particularidades e implicaciones frente a la reparación y reconocimiento de las víctimas en el exterior", exponiendo cinco factores que esta población colombiana en el exterior afronta: el carácter forzado de la migración, la experiencia y desarraigo, el miedo y la crisis de confianza, el cruce de fronteras y factores de género, raza, identidad sexual y la edad, entre otros”.  

Durante el panel "Alcances, desafíos y oportunidades de mejora en la implementación de la política pública de víctimas para la satisfacción de los derechos de las víctimas en el exterior", participaron Verónica Jaramillo, integrante del Colectivo de Migrantes y Exiliados/as Colombianos/as por la Paz (MECOPA) y de la Red de Víctimas Colombianas por la Paz en Latinoamérica REVICPAZ-LAC (Argentina); Gladys Ávila, víctima en el exilio (Suecia); Lorena Mesa, subdirectora general de la Unidad para las Víctimas; embajador Rafael Arismendy, coordinador del Grupo Interno de Trabajo de Asistencia a Connacionales - Cancillería (Colombia), y Elena Ambrosi, procuradora delegada para el Seguimiento al Acuerdo de Paz. Ángela Iranzo Dosdad, profesora-investigadora de relaciones internacionales en España, fue la moderadora. 

Consultados los panelistas sobre los desafíos de la atención a las víctimas en el exterior, Lorena Mesa dijo que “para la Unidad lo difícil ha sido los temas de registro y de declaraciones, es así como a 2012 teníamos solo 43 declaraciones, pero, a la fecha, son un poco más de 27.000 [víctimas incluidas en el Registro Único de Víctimas]”. Rafael Arismendy, por su parte, explicó que uno de los principales desafíos ha sido lograr que a partir de las representaciones consulares se pueda llegar a todos los sitios donde se encuentran las víctimas, señalando que la pandemia ha representado un desafío adicional para “llegar a las personas en situaciones de vulnerabilidad”; Elena Ambrosi, funcionaria de la procuraduría, dijo que la tarea de esa entidad es de seguimiento y de acompañamiento a las víctimas para garantizar sus derechos “y en ese sentido hemos tenido una dificultad relacionada con la ausencia de indicadores que muestren cómo avanza la atención a las víctimas. Por su parte Gladys Ávila expresó que el mayor desafío “es el reconocimiento de carácter jurídico tanto del delito como del hecho victimizante [la migración forzada transfronteriza] y que se reconozca ese delito [el desplazamiento forzado] fuera de las fronteras colombianas”, tema en el que coincidió con Verónica Jaramillo quien aseguró que “si no hay reconocimiento no existimos para la institucionalidad”.   

A modo de cerrar el panel y vislumbrar acciones a seguir de cara a los desafíos identificados, la moderadora, Ángela Iranzo Dosdad, resaltó la importancia de la articulación nacional y transnacional, y de la participación de diversos sectores y actores (tal como la academia y organizaciones no gubernamentales) para aportar a diversos asuntos identificados en torno al diálogo social, el reconocimiento de las víctimas en el exterior, la comprensión de las situaciones que enfrentan las víctimas y otras acciones en torno a la implementación de la política pública.    

Las conclusiones del encuentro estuvieron a cargo de Óscar Rico, coordinador del Grupo de Atención a Víctimas en el Exterior de la Unidad para las Víctimas, quien resaltó como asuntos fundamentales para la satisfacción de los derechos de las víctimas en el exterior, seguir avanzando hacia el reconocimiento de lo que ha sido la migración forzada transfronteriza, afianzar las diversas formas de participación de las víctimas en el exterior en la política pública y en proyectos e iniciativas enfocadas en atender necesidades o afectaciones, la importancia de crear alianzas intersectoriales y hacer gestión con actores en los países de acogida en busca de una mayor satisfacción de derechos socioeconómicos y culturales, entre otras. Agregó el funcionario que todo lo anterior hace parte de la construcción de paz y las garantías de no repetición.  

(Fin/CMC/LMY)