En Cúcuta, jóvenes víctimas le apuestan a la reconstrucción de sus proyectos de vida
Más de $100 millones en indemnizaciones recibieron 28 jóvenes afectados por el conflicto armado que residen en la capital de Norte de Santander.
La esperanza de tener un negocio, de realizar estudios superiores o de ayudar a sus familiares renació para 28 jóvenes víctimas del conflicto que cumplieron su mayoría de edad, desde el momento en que hoy la Unidad para las Víctimas les entregara más de $100 millones en encargos fiduciarios.
Durante la jornada, liderada por la Unidad, entidades territoriales, educativas, financieras y de salud como el Icetex, la Universidad Francisco de Paula Santander, el Iser (Instituto Superior de Educación Rural), la Universidad Remintong, el Sena, la Secretaría de Vivienda de la Gobernación de Norte de Santander y Supersalud dieron a conocer la oferta y los programas a los que pueden acceder las personas favorecidas.
“Esta actividad amplía los beneficios a estos jóvenes que hoy cuentan con su indemnización para afianzar el cumplimiento de sueños y metas con inversión”, comentó la directora de la Unidad para las Víctimas en Norte de Santander y Arauca, Johanna Gelvez Ascanio.
La funcionaria también señaló que “durante su crecimiento, la Unidad ha realizado procesos de acompañamiento psicosocial con diferentes estrategias orientadas a fortalecer sus proyectos de vida, que esperamos fortalezcan con una formación educativa y una adecuada inversión de los recursos que mejoren sus condiciones de vida”.
La ilusión y las manifestaciones de agradecimiento por parte de las jóvenes víctimas no se hicieron esperar. “La verdad agradezco mucho a la Unidad para las Víctimas porque me cayó como del cielo para poder invertir en un plan de negocio que tengo, para montar una tienda y porque tengo un bebé de dos añitos”, manifestó Erika Torrado.
Así mismo, el joven beneficiado Alexander Jaimes no dudó en asegurar que la plata la quería invertir en su futuro. “La mejor inversión actualmente es el estudio, quiero ser ingeniero de sistemas”.
Otros beneficiados, como Maynker Villamizar, pensaron más en sus familias. “Pienso ayudar a mis padres con la construcción de la casa e invito a los jóvenes que van a recibir esta ayuda para que la sepan invertir en educación y ser alguien en la vida”.
A esta jornada se le suma la realizada con 28 adultos mayores y en condición de discapacidad que recibieron más de $375 millones en el proceso de reparación individual con la entrega de sus cartas de indemnización.
Fin/CEG/EG