El Consejo Superior de la institución universitaria aprobó cupos especiales para que víctimas del conflicto armado de ese departamento puedan acceder gratuitamente a educación superior en la Alma Mater caucana.

Esta semana, mediante el Acuerdo Superior Número 016 del 2023, el Consejo Superior de la Universidad del Cauca aprobó una asignación de cupos para víctimas del conflicto armado de ese departamento. Se trata de un cupo especial para cada uno de los 54 programas de pregrado que ofrece la Universidad del Cauca y la apuesta comenzará a regir a partir del primer periodo del 2024.

Según quedó consignado en el acuerdo, las y los jóvenes que deseen ingresar por medio de este cupo especial deberán haber finalizado sus estudios de bachillerato en una institución educativa del departamento del Cauca. Además, deben estar inscritos en el Registro Único de Víctimas (RUV), por lo que deberán adjuntar certificación expedida por la Unidad para las Víctimas.

Es importante tener en cuenta que los bachilleres que hayan sido admitidos anteriormente en la Universidad del Cauca, o hayan sido beneficiarios de otro programa de admisión especial, no podrán acceder al cupo para las víctimas del conflicto armado.

“Esta es una apuesta para generarle oportunidades a nuestras y nuestros jóvenes, quienes han vivido el dolor de la guerra, y al mismo tiempo una manera de apostarle a la búsqueda de la paz en un departamento como el Cauca, que lo necesita tanto”, indicó Deibar René Hurtado Herrera, rector de la Universidad del Cauca.

Por otra parte, es importante destacar que los jóvenes que ingresen a través de este cupo especial para las víctimas del conflicto armado contarán con acompañamiento de la Universidad dentro de las líneas de crédito y subsidio, para cubrir los costos educativos y de manutención cuando el estudiante lo requiera o solicite.

Para mayor información, los interesados pueden ingresar a: www.unicauca.edu.co

En la Unidad para las Víctimas "Cambiamos para servir", con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.