![](https://portalhistorico.unidadvictimas.gov.co/sites/default/files/chat-sms.png)
Más de 130 víctimas del conflicto recibieron indemnizaciones en Huila y Caquetá
Estas entregas hacen parte de las 20 jornadas programadas para el primer semestre del año en los dos departamentos.
![](https://portalhistorico.unidadvictimas.gov.co/sites/default/files/styles/slide_700_350/public/arm3.jpeg?itok=zQtXONuJ)
![](https://portalhistorico.unidadvictimas.gov.co/sites/default/files/styles/slide_700_350/public/arm4.jpg?itok=_2OXb9eE)
La Unidad para la Atención y Reparación Integral de las Víctimas hizo entrega de más de 1.147 millones de pesos a sobrevivientes del conflicto en el sur del país.
En esta ocasión, 78 víctimas del departamento del Huila recibieron indemnizaciones administrativas por 633.556 millones de pesos.
Los actos se llevaron a cabo en las instalaciones de la Unidad para las Víctimas en Neiva y en las alcaldías de los municipios de Garzón y Pitalito. "Contamos con el apoyo de la Universidad Minuto de Dios y de la Superintendencia de Salud que dieron a conocer su oferta institucional a los beneficiarios”, indicó Yhina Paola Lombana López, directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Huila y Caquetá.
En el departamento del Caquetá se entregaron recursos que ascendieron a los 533.736 millones de pesos, a 31 sobrevivientes del conflicto.
Los beneficiados de la reparación económica son víctimas de Florencia y de los municipios de Belén de los Andaquíes, San José del Fragua, El Paujil, La Montañita y San Vicente del Caguán, entre otros.
“En Caquetá el 90 % de los beneficiarios son víctimas de desplazamiento; así mismo hay personas que padecieron el rigor de la guerra al soportar delitos atroces en contra de su libertad e integridad sexual, homicidio, lesiones personales, desaparición forzada y secuestro”, indicó Lombana.
La regional de la Unidad les brindó a los asistentes la debida orientación sobre cómo invertir el dinero adecuadamente, con el fin que impulsen proyectos de vida para dignificar y fortalecer a las personas afectadas y así cumplir con el propósito de la medida, que es otorgar una reparación integral.
José María Molina, una de las personas indemnizadas, describió este día como el más feliz de su vida después de haber sufrido el rigor del conflicto y señaló que invertirá los recursos recibidos en la compra de ganado para dedicarse de lleno a la comercialización de semovientes y llevar el sustento a su familia.
Así mismo, José Leandro, desde la silla de ruedas en la que se encuentra postrado desde hace varios años, producto de un ataque en su contra que prefiere no recordar, indicó que comprará un lote para construir una vivienda y que ya tiene todo listo para poner a funcionar una tienda en el lugar donde hoy vive, en Caquetá.
Los beneficiarios de estas jornadas son población priorizada por ser personas mayores de 74 años, presentar discapacidad o enfermedades terminales o catastróficas.
(Fin/NIL/COG)