La Unidad para las Víctimas ha priorizado 20 municipios en el departamento del Atlántico para brindar asistencia técnica y capacitar a las mesas de víctimas sobre la elaboración de sus planes de trabajo y los derechos que tienen dentro del protocolo de participación.

Las Mesas de Víctimas son espacios de trabajo temático y de participación efectiva de las víctimas del conflicto, de orden municipal, distrital, departamental y nacional, elegidos y designados por las mismas víctimas y sus organizaciones, y destinados para la discusión, interlocución, retroalimentación, capacitación y seguimiento de las disposiciones contenidas en la Ley 1448 de 2011 -Ley de Víctimas-, sus decretos reglamentarios, la jurisprudencia y demás normas complementarias.

Con la elección y conformación de nuevas mesas municipales en septiembre del año pasado, conformadas cada una entre 13 y 30 miembros, la Unidad para las Victimas ha priorizado 20 municipios en el Atlántico para brindar a cada mesa municipal, asistencia técnica en la elaboración de sus planes de trabajo para el periodo 2017-2019, y capacitaciones sobre la implementación del protocolo de participación efectiva de víctimas.

“Esta asistencia tiene por objeto proteger, garantizar y promover la participación efectiva de las víctimas brindándoles toda la formación necesaria para que conozcan sus derechos y deberes, y sepan implementar el protocolo debidamente para concertar con el Estado los planes, programas y proyectos, destinados a desarrollar políticas públicas de atención y reparación integral de víctimas”, expresó Alfredo Palencia, Director Territorial de la Unidad para las Victimas en Atlántico.

La línea política del proceso de información, educación, práctica e incidencia que adelanta la Subdirección de Participación de la Unidad de Víctimas es clara: la participación de las víctimas es para recuperar los derechos ciudadanos y ejercer plenamente su ciudadanía política, social, económica, y cultural. Mejor dicho, el proceso de participación debe estar dirigido a que los afectados por el conflicto dejen de ser víctimas. Logro al que deben llegar a través de su propia incidencia, en la transformación de su entorno y de ellos mismos.

Hasta la fecha, las mesas municipales de Santa Lucía, Polonuevo, Santo Tomás, Luruaco, Manatí y Usiacurí ya han recibido esta asistencia técnica por parte de la Unidad para las Víctimas la cual estará hasta el mes de agosto realizando esta formación.