Como parte de la estrategia de `Reparación Integral, Convivencia y Paz’, que la Unidad para las Víctimas desarrolla en el municipio de El Rosario, zona de cordillera de Nariño, un total de 240 personas recibieron la carta de indemnización administrativa al cierre de la primera fase de la estrategia en esta zona de Nariño.

En total, la entidad entregó recursos por el orden de los 1.348 millones de pesos a 240 sobrevivientes del conflicto, quienes fueron priorizados para recibir en esta primera fase su indemnización. De igual forma se notificaron 89 encargos fiduciarios para menores de edad víctimas del conflicto, que podrán reclamar el dinero una vez cumplan la mayoría de edad a los 18 años.

En la jornada, que se cumplió en las instalaciones de la casa de la cultura de El Rosario, se dieron cita las entidades que hacen parte del Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas del Conflicto (SNARIV), la cuales llevaron la oferta institucional a los asistentes.

El director de la Unidad en Nariño, Jaime Guerrero Vinueza, destacó que los municipios de El Rosario, Tumaco, Leiva y Policarpa fueron priorizados en Nariño para el desarrollo de la estrategia denominada ‘Reparación Integral, Convivencia y Paz’, con la cual se realizó un trabajo intenso en aspectos como acompañamiento psicosocial, medidas de rehabilitación y encuentros en los que participaron 360 personas de la zona de cordillera.

“Durante los últimos tres meses se realizaron talleres, encuentros y actividades de acompañamiento por parte de la Unidad, en los que las víctimas del conflicto desarrollaron, de la mano de los facilitadores, el  trabajo de recuperación del tejido social y lograron sanar heridas” indicó el directivo.

Las víctimas del conflicto en Nariño buscan la oportunidad para rehacer su proyecto de vida con el acompañamiento institucional; por ello, en los distintos stands de la Feria de Servicios la población se enteró de diversos programas institucionales, de servicios en salud, y de cómo acceder a programas financieros y de educación, entre otros.

 “Fue muy bueno para nosotros recibir este apoyo en lo emocional, para sanar el corazón y prepararnos para seguir adelante, la estrategia nos sirvió para darnos cuenta de que somos sobrevivientes y que el miedo no puede ser más grande que la esperanza” indicó Javier Rodriguez*, víctima del conflicto.

 *Nombre cambiado.