En este 9 de abril, la sociedad caucana se unió a una sola voz por los sobrevivientes del conflicto armado. Popayán fue el centro de la conmemoración donde cerca de 400 víctimas marcharon por la reparación y la no repetición de la violencia.

Con actos de dignificación, las víctimas del conflicto armado en Cauca hicieron sentir sus voces en el Día Nacional de la Solidaridad con las víctimas del conflicto armado. Varios municipios del departamento se unieron a esta conmemoración y con actos religiosos, caminatas, actos culturales y rituales simbólicos las víctimas expresaron su sentir.

“Este es un día especial para reconocer el trabajo que han venido desarrollando las víctimas del conflicto. Gracias a su incidencia, hoy todos estamos hablando de paz y hoy todos queremos que estos hechos no se repitan. Gracias a esta labor, en los casi cinco años que tiene la Ley de Víctimas tanto nacional como internacionalmente reconocemos que lo que ha pasado en Cauca ha dejado muchas lecciones, por lo que hoy podemos hablar de la construcción de una Colombia en paz”, expresó Jorge Vásquez, director territorial de la Unidad para las Víctimas en Cauca.

Popayán fue el epicentro de la conmemoración. Entidades departamentales y municipales acompañaron este día, que inició con una marcha por las principales calles de la ciudad. El gobernador del departamento, Oscar Rodrigo Campo, acompañó los actos simbólicos y se solidarizó con las víctimas: “Hablar de desarrollo y de nuevos aires de una sociedad es imposible sin hablar de la reparación a las víctimas. En el departamento hemos prendido todas las alarmas. Las víctimas nos obligan a revisar acciones concretas”.

Jesús Antonio Gallego, representante de la mesa municipal de participación de víctimas, expresó el profundo dolor de quienes sufrieron durante el conflicto y también hizo un llamado para que la sociedad se comprometa con las víctimas del conflicto: “Hoy queremos que nuestras voces se escuchen en el departamento del Cauca y en toda Colombia: lo que queremos es la construcción de la paz a través de este proceso que se está gestando. Vamos a lograr una convivencia pacífica. El mensaje es para toda la ciudadanía; hemos puesto nuestro dolor y nuestras lágrimas y el empeño para salir adelante”.

El Camino de las Lágrimas fue el acto central de la concentración en el Parque Caldas, donde víctimas de los diferentes hechos y de los sujetos de reparación colectiva del municipio recorrieron un camino de pétalos de rosa como reconocimiento a su dolor y compromiso para construir una Colombia en paz.

El sujeto de reparación colectiva del municipio de La Rejoya también hizo parte del evento. El director territorial, acompañado por Camilo Mendoza, delegado del gobierno nacional, hicieron entrega de unas palmas que se sembrarán en este corregimiento que hace 15 años vivió una masacre donde 10 de sus pobladores perdieron la vida.