Junio 10 2021 - Pereira - Risaralda
La Unidad para las Víctimas realizó el lanzamiento nacional del Sello Social Unidos Por Las Víctimas y una de esas víctimas emprendedoras está en la ciudad de Pereira.
Se trata de Nohemí Candamil víctima de desplazamiento forzado en varias ocasiones, quien nació en el municipio de Aguadas, Caldas, hoy vive en Pereira y sigue luchando por las víctimas, comercializando los productos a través de la asociación de varias iniciativas artesanales y de productos naturales, que se unifican en la “Tienda Café de la Paz”.
“La iniciativa Tienda Café de la Paz es asociativa y organizativa. Nacimos hace más de 15 años y representamos a muchas organizaciones del país a través de estos productos. Cada uno tiene una historia, pero al final todos buscamos la restitución de la dignidad de la mujer emprendedora, esta es una vitrina maravillosa que hemos logrado con el apoyo de la Unidad. Los invito a que hagamos equipo y fortalezcamos este proyecto”, comenta Nohemí Candamil.
En esta jornada la Unidad contó con el apoyo de un importante aliado en Pereira, la Terminal de Transportes, en donde se ubicó el stand y se tuvo la oportunidad de exhibir productos como: el sombrero aguadeño, bocadillo de plátano, miel de abeja, bisutería, polen y propóleo, chocolate, sandalias, bizcocho de achira y café especial, entre otros.
Ha salido adelante a pesar de las difíciles situaciones que le ha tocado afrontar: ha sido desplazada de Sopetrán (Antioquia), Córdoba, Bogotá y hasta de su natal Aguadas, además padeció la muerte de su hermano mayor líder social en Antioquia, y otro de sus hermanos está vivo de milagro, tras caer en una mina antipersonal.
“Yo sigo firme a pesar de todo, ayudando a las víctimas para comercializar los productos. Desde que llegué a Pereira la Unidad ha sido de gran apoyo, me han acompañado mucho con el proyecto y me han ofrecido capacitación. Yo soy una loca soñadora y con este tipo de ferias nos seguimos fortaleciendo, este es el sustento mío, de mi hija y de familias que solo queremos que nos dejen trabajar en paz”, dice Nohemí.
Afirma que no duerme, que solo sueña y que el aprendizaje que ha tenido con la ayuda de muchas entidades es muy satisfactorio, y espera poder inspirar a muchas mujeres convirtiéndose en un faro para que todas puedan emprender y logren llevar sus productos a muchas partes del mundo.
“Siempre he dicho que las personas que luchan solas por sus sueños tienen el camino mucho más difícil, pero como se dice popularmente, la unión hace la fuerza y yo quiero que en todo el país se formen asociaciones como la Fundación Gestión Paz y Dignidad a la que represento, para trabajar en equipo y apalancar los emprendimientos con responsabilidad social”, concluyó Candamil.
Ramón Rodríguez Andrade, director de la Unidad para las Víctimas dijo sobre el particular: “Esta iniciativa del lanzamiento del Sello Social Unidos por las Víctimas, tiene como un objetivo primordial posicionar todos los productos que las victimas emprendedoras han venido trabajando, hay personas que han iniciado sus emprendimientos con la ayuda humanitaria o la indemnización y queremos hacer un acompañamiento para posicionar los productos en el mercado nacional”.
Este Sello es un reconocimiento a quienes le apuestan a la reconstrucción de sus proyectos de vida, que han tejido desde el núcleo de su entorno social, familiar, local, comunitario y nacional y aportan a la reactivación económica de Colombia.
FIN: (EHB/COG)