Nov
25
2016

Unidad para las Víctimas estrena pionera estrategia para reparar a sobrevivientes LGBTI

Con una estrategia nunca antes vista en países que han padecido un conflicto armado, la Unidad para las Víctimas inicia este viernes en cuatro puntos del país la Estrategia de Reparación Integral para sobrevivientes LGBTI (Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales). Esta iniciativa se une así a jornadas similares diseñadas por la entidad para quienes han padecido de violencia sexual.

Bogotá, D.C.Bogotá, D.C.

La Unidad para las Víctimas inicia este viernes la estrategia piloto “Reparando el Derecho a Ser”, con metodología propia y basada en el caso colombiano, con el fin de lograr, por primera vez, la recuperación emocional con un enfoque de derechos  de integrantes de sectores sociales LGBTI que han padecido el conflicto armado.

La propuesta tienen el objetivo de “reivindicarnos como Estado, reconocer las diferencias y reconocer el derecho a ser de cada persona y su libertad”, según Alicia Rueda, subdirectora de Reparación Individual de la Unidad para las Víctimas.

Su realización será en dos momentos: el primero, el 25 y 26 de noviembre, con “un taller psicosocial denominado ‘Yo decido ser’” y con la escogencia de medidas de satisfacción para resarcir el daño sufrido; y el segundo, el 9 y 10 de diciembre, para concretar esas medidas, agregó la funcionaria.

El énfasis será psicológico. “Se van a utilizar mucho los materiales artísticos para dejar aflorar todos estos sentimientos guardados. Se va a buscar cómo hacer un duelo y enterrar a esa persona que nació con una identidad y que no es la misma que participa en la jornada”, subrayó Rueda.

Además, los funcionarios de la Unidad instarán a los participantes a construir un diario sobre momentos clave de su vida, entre otras actividades. Adicionalmente, se pondrán en práctica las medidas que consideren necesarias para reparar el daño.

En las citadas jornadas, los participantes recibirán la Carta de Dignificación, que reconoce el impacto del conflicto en sus vidas. “Está suscrita por el director general de la Unidad, Alan Jara, y tiene un contenido específico para estos sujetos de especial protección constitucional”, añadió Rueda.

Las actividades transcurrirán simultáneamente en Bogotá, Antioquia, Nariño y Putumayo, como piloto, con miras a ampliar la estrategia a otros lugares del país en 2017. En Bolívar, se pondrá en práctica en diciembre.

Aparte del apoyo psicológico, las víctimas con orientaciones sexuales e identidades de género no hegemónicas contarán con información sobre el decreto 1227 de 2015, que trata sobre el cambio de nombre en el documento de identidad.

Además, quienes así lo deseen, podrán actualizar sus datos en el Registro Único de Víctimas (RUV), con relación a su autorreconocimiento como parte del sector social LGBTI.

Se calcula que un centenar de personas se beneficiará de esta iniciativa.

Más de dos años de preparación

La estrategia de de Reparación Integral para los sobrevivientes de los sectores sociales LGBTI tomó dos años de preparación, y en ella participaron psicólogos, trabajadores sociales, antropólogos, entre otros profesionales de la Subdirección de Reparación Individual. La fase de investigación consistió en “conversar mucho con las víctimas con orientaciones sexuales e identidades y de género no hegemónicas, en discutir con los equipos de Enfoque Diferencial de la Unidad qué podíamos hacer, y en inspirarnos en lo que ya había funcionado, como la Estrategia de Reparación Integral a mujeres víctimas de Violencia Sexual”, afirmó Rueda.

Así, se modeló un taller ajustado a los requerimientos específicos de la población, partiendo de la escasez de experiencias de este tipo. “Estas personas han sufrido especialmente el conflicto de manera distinta, porque además de ser victimizadas, lo han sido simplemente por ser distintas. En esa medida, hay una doble victimización”, complementó la funcionaria.

En Colombia, 1.783 personas LGBTI han sido víctimas del conflicto según el RUV de la Unidad para las Víctimas, aunque funcionarios reconocen que puede haber un subregistro, que se espera superar con estrategias como la de “Reparando el Derecho a Ser”.