La jornada se ha convertido en un espacio que se venía realizando periódicamente y que culminó con el objetivo de contribuir a la aplicabilidad de las medidas de satisfacción.

En el centro de eventos El Oasis de Apartadó se cumplió nuevamente la cita con las mujeres víctimas de violencia basada en género, un espacio que se venía realizando periódicamente y que culminó con el objetivo de contribuir a la aplicabilidad de las medidas de satisfacción y acompañar de manera integral a las víctimas de estos hechos.

La jornada de reparación integral de mujeres víctimas es la última intervención en el año de una serie de acciones que se venían desarrollando en tres momentos y que constituyeron en la posibilidad para las participantes de recuperarse de las afectaciones derivadas de los hechos, es por ello que la clausura se convirtió en una celebración, donde las manifestaciones de cariño y agradecimiento por parte de las mujeres no se hicieron esperar.

Ellas, conscientes que si bien la asistencia por parte de la Unidad es el deber ser dentro de sus derechos como víctimas, colmaron sus expectativas frente al proceso como lo manifestó Miriam Oviedo: “tengo que reconocer que creí al principio que sería más de lo mismo, pero hoy me doy cuenta que no era así, que lo que he recibido por parte de ustedes cambió mi modo de ver la vida, antes nadie se preocupaba por nosotras hoy podemos decir no estamos solas”.

Así mismo, la directora Territorial de la Unidad para las Víctimas, Ángela María Hernández Peña, quiso devolverles a las presentes la manifestación de cariño mediante un abrazo a cada una de ellas y les dejó claro que el acompañamiento por parte de la Unidad permanecerá: “Las felicito por su persistencia y valentía, que a pesar de sus quehaceres diarios y tener otras obligaciones culminaron satisfactoriamente este proceso que en realidad busca reconstruir su tejido social, devolviendo la esperanza y la confianza en ustedes mismas y en la institucionalidad ”.

Por último, Hernández Peña señaló que “es admirable la capacidad que tienen las mujeres víctimas de transformar los hechos sucedidos en fortalezas, ya que a la mayoría de las asistentes manifestó el ánimo de acercar a través de las experiencias vividas a otras mujeres que aún no han dado el paso hacia la dignificación y reparación”, concluyó.