Cerca de 30 líderes de todo el territorio nacional se reúnen en Bogotá para hablar de construcción de paz y garantía de derechos con enfoque diferencial de orientaciones sexuales e identidades de género no hegemónicas.

El encuentro inició con objetivos claros en cuanto a los temas a tratar, entre los que se destacaron: fortalecer la política pública de víctimas con enfoque diferencial, hacer propuestas para adecuar estrategias por parte del Estado para el goce efectivo de derechos de la población LGBTI, conocer los acuerdos de La Habana con perspectiva de género, entre otros.

Según Gabriel Bustamante, subdirector de Participación de la Unidad para las Víctimas, “lo más importante para esta población son las medidas de reparación simbólica ya que este grupo es uno de los focos de la coyuntura, ¿qué es lo que los acuerdos van a proteger?, ¿cuáles serán las garantías para el sector LGBTI? Y en ese sentido, señaló, es importante despejar todas las inquietudes.

A la vez afirmó, “reconozco la valentía de asumir los retos de su enfoque, sobre todo en los territorios. Es el sector en el que más se tendrá que trabajar en el posconflicto. Mientras no se conozca la verdad, no va a haber paz. El nombre de la paz es la diversidad”, aseguró. “Hay que fortalecer la política, se requiere una reparación transformadora, pero sobre todo simbólica”, agregó.

José Thompson, director ejecutivo del Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH), resaltó la tarea del gobierno en cuanto a los acuerdos de paz sin que el conflicto haya terminado, indicó que el enfoque diferencial le ha dado una importancia única a los acuerdos, ya que, en su opinión, “es la población que más ha sufrido el conflicto”.

Una de las principales preocupaciones de las víctimas del conflicto pertenecientes a este enfoque diferencial manifestada durante esta primera jornada es la garantía de sus derechos. Al respecto, la representante del Ministerio del Interior indicó que, precisamente estos espacios se dan para poder socializar los acuerdos en lo que se refiere a la diversidad. Añadió que se deben identificar las principales barreras que se han tenido hasta el momento, con el fin de restablecer los derechos de la población víctima con enfoque diferencial y esto ya sería un avance.

José Fernando Serrano, perteneciente al equipo de investigación de Caribe Afirmativo, corporación por el reconocimiento de los derechos de la diversidad sexual e identidades de género, manifestó: “Conflicto y Paz, tienen una dimensión de género y el género no se puede aislar de la construcción de paz”.

El movimiento LGBTI ha trabajado hace años en el restablecimiento de sus derechos y los acuerdos de La Habana son resultado de la historia de activismo que los líderes han realizado en las regiones. Detrás de los acuerdos hay apuestas sociales que el movimiento social ha construido, agregó Serrano.

Al finalizar la jornada, los líderes se dividieron en grupos para trabajar, discutir y abrir un debate acerca de lo que se ha venido planteando con respecto a la garantía de derechos para los sectores sociales LGBTI y personas con orientaciones sexuales e identidades de género no normativas víctimas del conflicto armado, de manera que que el tema se desarrolle de la mejor manera posible.

Durante la segunda jornada se consolidarán propuestas que serán revisadas por las entidades.