Jul
13
2021

Familias desplazadas de Páez (Boyacá) rescatan tradiciones y costumbres que les arrebató la violencia

La iniciativa hace parte del desarrollo de la estrategia psicosocial “Tejiéndonos” que se construye de la mano de la Unidad para las Víctimas, como proceso complementario del programa de retornos y reubicaciones.

BoyacáPáez

De las 882 víctimas sujeto de atención registradas oficialmente en el municipio de Páez en Boyacá, 799 son personas que enfrentaron el desarraigo o desplazamiento forzado por cuenta de grupos violentos.  La mayoría de ellas retornaron a sus veredas o hacen parte de las familias que habitan el centro poblado. 

Ante este panorama, la Unidad para las Víctimas - Dirección Territorial Central, ha implementado en el municipio el programa de retornos y reubicaciones apoyado por el área psicosocial mediante el desarrollo de procesos que buscan recuperar el tejido social comunitario. Tejiéndonos, es una de estas iniciativas.   

“Bajo esta línea de acción, nuestros profesionales vienen realizando un ejercicio de integración comunitaria en el que se fortalece la convivencia para consolidar una nueva etapa en las vidas de estas familias afectadas por el conflicto armado interno”, explicó la directora de la territorial María José Dangond David.

En la actualidad, en torno a la estrategia “Tejiéndonos”, se ha logrado reunir un nutrido grupo de hombres y mujeres de la cabecera municipal y veredas cercanas que decidieron hacer parte de los encuentros y de manera activa desarrollar las temáticas para avanzar en el objetivo de mejorar la convivencia y rescatar los valores y hábitos que la guerra por un tiempo les arrebató. 

“Este es un ejercicio muy especial y estamos convencidos que con la estrategia vamos a lograr la pertinencia y la formación de líderes para que se conviertan en multiplicadores de buenas prácticas sociales”, concluyó la directora. 

En el más reciente encuentro se realizó la actividad denominada construcción del sentido de comunidad, prácticas sociales tradicionales, en la que los participantes plasmaron  el recorrido de las etapas de sus vidas (niñez, juventud y adultez) sobre un pedazo de tela para luego, por grupos, exponerlas ante sus compañeros y finalmente reflexionar sobre la importancia de recobrar las tradiciones y costumbres como acción de vida en comunidad que favorece la convivencia y fortalece vínculos. 

Fin/WPG /COG