En Cúcuta, mujeres víctimas conmemoraron el Día Internacional de los Derechos Humanos
Durante la jornada, las personas afectadas por el conflicto armado impulsaron acciones transformadoras y mostraron ejemplos prácticos para contribuir a la recuperación y fomento de una sociedad justa y resiliente.
Promover la dignidad humana sin importar las condiciones culturales diferenciales, garantizando el cumplimiento y haciendo efectivas las acciones y mecanismos de defensa para avanzar en la reducción de las violaciones a los derechos humanos, fue el mensaje enviado por las víctimas de la violencia en el marco de la conmemoración del 10 de diciembre.
“Durante una jornada que realizamos en Cúcuta, cumpliendo con los protocolos de bioseguridad, reunimos a los representantes de la población afectada por la violencia en esta zona del país para generar y promover espacios de reflexión y educación que fortalezcan la participación de personas que han sido víctimas de hechos atroces que han vulnerado sus derechos humanos. Ellos hoy impulsan acciones transformadoras y con sus historias de vida nos muestran ejemplos prácticos e inspiradores que evidencian la recuperación y el fomento de una sociedad resiliente y justa, que le apuesta a la construcción de paz con hechos que aportan a la convivencia y reconciliación”, aseguró la directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Norte de Santander y Arauca, Alicia María Rojas Pérez.
Por su parte, los asistentes reconocieron la importancia de la jornada, contextualizando esta fecha en sus entornos sociales para analizar las acciones que se promueven en cumplimiento y defensa de los derechos humanos. Además, expusieron la transformación social que han generado desde sus experiencias de vida.
“Estamos en esta actividad y ha sido muy importante porque estamos avanzando en el proceso de olvidar un poco el pasado, recordando siempre a nuestras víctimas. Hoy ha sido un día muy especial para nosotras porque nos han tenido en cuenta; el pasado hay que dejarlo atrás, hay que aprender a perdonar y hemos aprendido a conocer un poco más de nuestros derechos: el derecho a la vida, la libertad, la expresión y el derecho a no volver a ser víctima nuevamente”, señaló María Yamile Díaz, víctima del conflicto armado.
La metodología implementada por un equipo de profesionales en psicología y trabajo social de la Unidad para las Víctimas se desarrolló en tres escenarios enmarcados de la siguiente manera:
• Abonando: espacio donde los participantes reconocieron la importancia de la conmemoración de esta fecha y su alcance en cada uno de sus contextos sociales.
• Sembrando: en este escenario representaron los derechos humanos, exponiendo su importancia, beneficios y defensa de los mismos en la actualidad.
• Cosechando: en este espacio realizaron una memoria para dar viabilidad de garantías en el cumplimiento de los derechos humanos para mejorar las condiciones de vida de la población víctima de la violencia en el marco de la reconstrucción del tejido social.
En medio de las condiciones sanitarias por las que atraviesa el país producto de la pandemia de la COVID-19, la directora territorial envió un mensaje para erradicar cualquier tipo de discriminación estructural y racismo. Invitó a actuar frente a las desigualdades en medio de la crisis sanitaria, proteger los derechos económicos, sociales y culturales de la población afectada por el conflicto armado y en condición de vulnerabilidad, impulsando la participación y solidaridad de la sociedad civil de cara a un desarrollo sostenible.
(Fin/CEG/CMC/LMY)