Este espacio se realizará el próximo martes 13 de junio en el Jardín Botánico José Celestino Mutis en Bogotá, con la intención de escuchar las voces y sentires de las mujeres gitanas quienes sufrieron el conflicto armado y conocer cómo la violencia afectó su cultura y su cosmovisión. Esta es la primera vez que la Unidad para las Víctimas genera un escenario de visibilización, fortalecimiento y encuentro dirigido a las mujeres gitanas víctimas de 10 zonas de Colombia.

El próximo martes 13 de junio, la Unidad para las Víctimas realizará el primer Encuentro Nacional de Mujeres Víctimas Gitanas, un espacio en el que serán escuchadas las voces de quienes sufrieron el conflicto armado y de qué manera estas afectaciones interfirieron en su cultura y su cosmovisión.

Esta es la primera vez que se genera un espacio que reúne a mujeres víctimas pertenecientes al pueblo Rrom de todo el país con el objetivo de avanzar en la concertación de un plan de acción para atender a estas mujeres.

Durante el encuentro se abordarán aspectos correlacionados con su diario vivir como víctimas, sus usos, costumbres, tradiciones, gastronomía y diáspora, y así generar un diálogo de saberes de este pueblo étnico, declarado Sujeto de Reparación Colectiva (SRC) por la Unidad. Adicional a lo anterior, se busca construir conjuntamente un plan de trabajo que permita alcanzar las metas de reparación integral a nivel territorial y con enfoque de género de la mano de 23 sabedoras gitanas.

El pueblo gitano ha sido víctima del conflicto armado durante los últimos 40 años y su población se ha reducido considerablemente y su cultura ha sido afectada.

La presencia de actores armados ha afectado la transmisión de los saberes tradicionales y ha hecho que la economía del pueblo Rrom se estanque, debido a que es un grupo itinerante que se vio limitado por actores armados. A esto se suma que las mujeres, quienes cumplen un papel fundamental como cuidadoras, gestoras culturales y transmisoras de saberes, han sido afectadas por múltiples situaciones de desplazamiento y violencia. Pese a todo esto, los gitanos han resistido al conflicto armado con su cultura, la práctica de sus costumbres y la resolución pacífica de conflictos a través de la conciliación y el diálogo.

La Unidad para las Víctimas trabaja en el resarcimiento del daño en el marco de una deuda histórica que tiene el país con las víctimas del pueblo Rrom y por ello está generando una estrategia concertada para disminuir la brecha en el acceso y la garantía de los derechos de las víctimas del conflicto armado del pueblo gitano.

En la Unidad para las Víctimas "Cambiamos para servir" con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.

Foto: Cortesía de Secretaría Distrital de Gobierno.