Cuarenta representantes de las comunidades étnicas analizaron este viernes en la capital de La Guajira los avances en los escenarios de participación para indígenas y afros. Este Encuentro Interétnico es organizado por la Unidad para las Víctimas.

Con la participación de 40 líderes de comunidades indígenas y afrocolombianas se llevó a cabo esta semana en Riohacha el Encuentro Interétnico promovido por la Unidad para las Víctimas con el objetivo de abrir espacios de participación a estos grupos poblacionales en el proceso de implementación de los Acuerdos de Paz.

"Tenemos una lucha común y como líderes --estemos o no en las Mesas de Participación de Víctimas-- debemos continuar esta lucha; unidos y con un objetivo común", aseguró Marina Camargo, representante de la Mesa Nacional de las Comunidades Negras, Afrocolombianas, Raizales y Palenqueras.

En este espacio de diálogo intercultural, los participantes reiteraron su compromiso con la construcción de la paz al tiempo que revisaron los avances en materia de participación de sus comunidades, en el cual, los líderes hicieron un llamado al Estado para el fortalecimiento de un enfoque étnico.

En ese sentido, Yasmid Banguero, líder de Casanare, instó a que "todos los procesos se piensen desde los territorios y de acuerdo a las características de los mismos", según dijo.

Ana María Almario, subdirectora del área de Participación de la entidad, destacó: "Lo que se ha construido en estos dos años es un legado para que quienes sean elegidos en las Mesas de Participación Efectiva representen a las víctimas étnicas en estos espacios y trabajen por la garantía de derechos de los grupos étnicos".

La reparación integral --tanto individual como colectiva--; el fortalecimiento y protección de los líderes; el respeto por la autonomía y la autodeterminación; la dignificación de los pueblos y comunidades, entre otros objetivos; representan la ruta trazada por los representantes salientes.

Con ésta, se pretende reivindicar estos derechos de acuerdo a los Decretos Ley 4633 y 4635, que fijan las medidas de atención, asistencia y reparación para las comunidades indígenas y afrodescendientes víctimas del conflicto, respectivamente.

"Nosotros los indígenas nos solidarizamos con los compañeros afros, que recientemente perdieron a Bernardo (Cuero Bravo, miembro de la Asociación Nacional de Afrodescendientes Afrodes de Atlántico)”, aseguró Rosario Aguilar, representante indígena ante la Mesa Nacional de Participación.

“Desde nuestros pueblos hemos perdido muchos de nuestros líderes y sabemos que si hoy estamos aquí es para continuar con el legado que ellos dejaron", añadió la representante indígena.

A su turno, Gabriel Bustamante, delegado para las Víctimas de la Defensoría del Pueblo, expresó: "Estamos en un momento coyuntural, donde lo que se construya hoy no sólo definirá el futuro de la paz sino de todos los colombianos y, en especial, para los grupos étnicos".

Este espacio estuvo acompañado por la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), la Defensoría del Pueblo, la Organización Nacional de Indígenas de Colombia (ONIC), la dirección territorial Cesar - Guajira de la Unidad para las Víctimas y de la Alcaldía de Riohacha.

El encuentro se realizó en el marco de los enfoques diferenciales que reunió a más de 300 representantes de diferentes departamentos del país en sendos encuentros realizados durante toda la semana tanto en Riohacha como en la capital colombiana.