La Unidad para las Víctimas ha distribuido paquetes alimentarios y de aseo para las familias víctimas en condición de vulnerabilidad durante la pandemia.

Más de 400 ayudas alimentarias comenzaron a entregarse en nueve comunidades del departamento de Arauca para garantizar la atención de las familias víctimas del conflicto armado.   

La directora de la Unidad para las Víctimas en Norte de Santander y Arauca, Alicia María Rojas Pérez, explicó que este mecanismo de atención se viene fortaleciendo: “Estamos llegando a todos los rincones de los siete municipios que conforman este departamento del oriente del país. Mes a mes, un equipo humano y profesional de la Unidad llega a los hogares de las familias en extrema condición de vulnerabilidad”.

La funcionaria agregó que en esta oportunidad la asistencia alimentaria comenzó a llegar a las comunidades de Caño Claro, La Esperanza (Siberia), La Esperanza (Antioqueñita), Iguanitos (Independencia), Iguanitos (Pavitas) y Palma Real en el municipio de Tame. De igual manera, la distribución de los paquetes alimentarios se realizará en las comunidades de As Pejenas, Puerto Rondón, Jitnu, Arauca y Selvas del Lipa del pueblo jitnu.   

“Estos kits contienen alimentos y elementos de aseo de primera necesidad. Estamos acatando y cumpliendo los protocolos sanitarios para evitar aglomeraciones. Entendemos las difíciles condiciones que enfrentan muchas de las familias víctimas del conflicto armado y seguimos trabajando para atender aquellas que se encuentran en máxima condición de vulnerabilidad en rincones apartados de nuestra geografía”, puntualizó la directora territorial.   

Las entregas continuarán esta semana en el marco de las jornadas de asistencia alimentaria para cumplir con el proceso de atención humanitaria. En tiempos de pandemia, la Unidad para las Víctimas ha entregado en Arauca más de 1.500 ayudas humanitarias.   

(Fin/CEG/CMC/LMY)