Víctimas de los municipios de Ataco, Coyaima, Natagaima, Rioblanco, Planadas y los cabildos indígenas del sur del Tolima, recibieron atención sobre los diferentes servicios de la Unidad para las Víctimas.

La Unidad para las Víctimas se trasladó al parque municipal de Ataco, Tolima, para atender las inquietudes y solicitudes de las y los pobladores víctimas del conflicto de este territorio. Durante el Festival Juntémonos, las y los asistentes accedieron a certificaciones, conocieron el estado de sus procesos de indemnización, realizaron la inscripción en el Registro Único de Víctimas (RUV) y recibieron asesoría integral sobre la oferta de la Unidad.

José Calderón, es una de las 8.042 víctimas del conflicto de Ataco, Tolima. Vive en la vereda San Roque, ubicada en la zona rural de este municipio. Este hombre campesino fue víctima de desplazamiento y acudió al festival para ser notificado sobre el proceso de reparación al que tiene derecho. “Me voy satisfecho, me atendieron muy bien. Muy bueno esto, uno se da cuenta de cómo van las vainas. Acá lo atienden a uno más fácil”, afirmó.

En el departamento de Tolima, la Unidad para las Víctimas cuenta con puntos de atención a víctimas en Purificación, Planadas, Ataco, Líbano, San Sebastián de Mariquita, Chaparral e Ibagué. Es importante destacar que es la primera vez que un evento de esta envergadura, con 50 entidades, llega al sur del Tolima a atender las necesidades locales.

Entre las más de 70 capacitaciones y actividades culturales que se llevaron a cabo, se realizó una jornada de juegos tradicionales, un diálogo de saberes con los pueblos originarios pijao, presentaciones de danzas típicas a cargo de grupos juveniles del sur del Tolima, demostraciones artísticas de Hip Hop y la presentación de un documental sobre el proceso social de los jóvenes de Ataco a cargo del colectivo Expresarte del municipio, entre otros. Esto, como una manera de generar tejido social.

De esta manera, el Gobierno del Cambio a través de este festival liderado por Función Pública, atendió cerca de 10.000 ciudadanos que, de otra manera, no habrían podido acceder a esta información o para ello necesitarían desplazarse a ciudades capitales, o, incluso, hasta Bogotá. Es importante señalar que, como construcción colectiva, la oferta institucional que llegó al territorio fue concertada con la comunidad con el objetivo de satisfacer sus necesidades.

En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.