Nov
24
2021

A través del proyecto “Granja Los Pinos”, jóvenes víctimas del conflicto volvieron a sembrar

Gracias a la alianza entre la Unidad y Fundación Niños de la Esperanza, 42 jóvenes víctimas del conflicto fortalecieron sus lazos con la ruralidad y avanzaron en su reparación integral.

Bogotá, D.C.Bogotá, D.C.

Jóvenes campesinos afectados por el conflicto volvieron a sembrar a través del proyecto “Granja Los Pinos”, liderado por la Fundación Niños de la Esperanza, institución con más de 20 años de experiencia en la formación de los derechos de niños, niñas y jóvenes en el país.

La Unidad para las Víctimas ha acompañado este proceso en 2021 a través de la estrategia de recuperación psicosocial “Hilando”, con dos grupos, cada uno de 21 jóvenes entre los 18 y 30 años, residentes en la zona rural de Santander, Boyacá, Cesar, Antioquia, Norte de Santander, Bolívar y Cundinamarca.

Durante tres meses, a través de la modalidad internado en la Granja Los Pinos, ubicada en el municipio de Albania en el departamento de Santander, se desarrolló el proceso de formación en producción agrícola para la seguridad alimentaria, agroecológica y desarrollo rural, impartida y certificada por el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) con enfoque transversal en derechos humanos y ciudadanía rural.

La Unidad, a través del Grupo de Enfoque Psicosocial, desarrolló la estrategia de recuperación “Hilando” en nueve encuentros que propiciaron espacios reflexivos para contribuir con la dignificación, la transformación de imaginarios derivados de las afectaciones ocasionadas por la violencia y fortalecer las redes de apoyo de los participantes, aportando en el curso de vida, evitando la revictimización y el surgimiento de nuevas violencias.

“Esta experiencia en la granja ha sido maravillosa. Fueron tres meses de capacitación y de pensar en un futuro, levantarnos, ser mejores, estamos firmes con otro pensamiento y con ganas de salir adelante”, manifestó Osneider David Campo Suárez, joven participante.

Cristian Yepes Hernández, otro de los jóvenes beneficiarios, destacó que, “ha sido un tema nuevo e importante para nosotros, desconocíamos la siembra de hortalizas y de otras plantas. Nos llevaremos una aprendizaje que queremos replicar en nuestra población con nuestros amigos y paisanos sobre esta experiencia tan hermosa, agradecido de corazón con cada una de las personas y entidades que han participado en el proyecto por haber aportado ese granito de arena para el aprendizaje de nosotros”, puntualizó. 

Esta alianza, que es un trabajo conjunto entre la Unidad para las Víctimas, el SENA, la Fundación Niños de la Esperanza, la Fundación Enfants del L’Espoir y la Corporación Psicosalud, con recursos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Luxemburgo, propició el reencuentro con el campo como un escenario posible para el desarrollo de las potencialidades de los jóvenes y el cumplimiento de proyectos de vida al servicio de sí mismos, sus familias y comunidad, orientados a la no repetición de los hechos de violencia.

Fin/ YUM/COG