Una familia antioqueña que reside en la capital del país asistió a la entrega simbólica de su ser querido, ante la imposibilidad de dar con el cuerpo de la víctima.

Fran Deninsson Castrillón Casas tenía 21 años cuando desapareció en el 2003. Los hechos se atribuyeron a integrantes del Bloque Central Bolívar, grupo organizado al margen de la ley, que confesaron ser los responsables del suceso.

Ante la imposibilidad de hallar los restos humanos por parte de las entidades competentes, y previa concertación con los familiares, se desarrolló la ceremonia simbólica en las instalaciones de la Unidad para las Víctimas, actividad que inició con un espacio de acercamiento por parte de los profesionales del Grupo de Enfoque Psicosocial con el objetivo de abordar las afectaciones psicosociales de los familiares derivadas del hecho victimizante. 

“El acompañamiento ha sido muy bueno. Esto ayuda a que uno descanse un poco, a que su cuerpo se despeje, es un proceso que uno no se esperaba pero que se necesita y da paz. Yo les digo a las familias que trabajar unidos es lo más importante, siempre darnos ese apoyo y estar juntos durante todo el proceso”, aseguró Diny Paola Castrillón Casas, familiar.

Por su parte, Rocío Quintero, fiscal comisionada para esta diligencia, manifestó que “se llevó a cabo la diligencia de entrega simbólica del cuerpo de Fran Deninsson Castrillón; con ocasión de una sentencia proferida por un tribunal de Justicia y Paz en relación con la imposibilidad de dar con la ubicación del cuerpo de esta víctima, el tribunal ordena la entrega simbólica a sus familiares”.

En la diligencia, coordinada por la Fiscalía General de la Nación, participaron también instituciones como la Secretaría de Salud distrital y la Policía Nacional; otorgando garantías de reparación a las familias víctimas con miras a  la no repetición de estos hechos.

Fin/YUM/COG