Solo cuatro indemnizaciones administrativas, por un valor total de 42 millones de pesos, han sido entregadas por la Unidad para las Víctimas a presuntas víctimas fallecidas. No ha habido pagos hechos de manera indebida. Desde el 2013, La Unidad ha interpuesto 1.483 denuncias ante la Fiscalía General de la Nación por hechos relacionados con falsas víctimas.

Frente a las afirmaciones hechas por algunos medios de comunicación en relación a que la Unidad para las Víctimas ha realizado pagos de manera indebida a falsas víctimas, la entidad aclara que esa información es inexacta y sesgada.

Solo han sido detectados cuatro casos de entrega de indemnización administrativa (0.0029% de los giros), por un valor total de 42 millones de pesos, a presuntas víctimas fallecidas.

Por otra parte, desde el 2013, en desarrollo de la campaña de “Ojo con el Fraude, no coma cuento” que busca proteger a las víctimas y los recursos para repararlas de manera integral, la Unidad ha recibido 6.121 quejas por casos de presuntas víctimas falsas que pretendieron recibir alguno de los beneficios que otorga el Gobierno nacional para los sobrevivientes del conflicto armado interno.

Tras ser analizadas en la entidad, fueron interpuestas 1.780 denuncias a lo largo del territorio nacional en la Fiscalía General de la Nación. De esas denuncias, 1.483 (83%) fueron por conductas relacionados con fraudes de presuntas falsas víctimas.

Con el apoyo de la Fiscalía, del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) y de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (DIJIN), en Antioquia y en Bogotá se lograron 21 capturas en las cuales se han visto involucrados tramitadores.

Dentro del informe que elaboró la Contraloría General de la República sobre la Unidad para las Víctimas, al que se han referido algunos medios, se hace referencia al reconocimiento de algunas compensaciones económicas a víctimas que han fallecido, lo cual obedece a que en el tránsito del reconocimiento como víctima y el pago de la indemnización administrativa, los destinatarios pueden morir sin que la Unidad para las Víctimas se entere.

La Contraloría en su informe jamás afirmó que los aspectos excepcionales a mejorar en la Unidad obedecieran al mal manejo de los recursos públicos asignados para la reparación de las víctimas.