Cerca de 180 mil millones de pesos es la inversión del Estado en las víctimas de la territorial Eje Cafetero
Este miércoles 11 de noviembre se cumplió la Rendición de Cuentas Territorial Eje Cafetero de la Unidad de Atención y Reparación Integral a las Víctimas. El balance del año es muy positivo.
En total la inversión realizada por la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las víctimas, desde la creación de la territorial Eje Cafetero en el año 2012, hasta el presente año en temas como apoyo a entes territoriales, atención y apoyo humanitario e indemnizaciones, ha sido de 180.419 millones de pesos.
77.850 millones han sido destinados a las víctimas en el departamento de Risaralda, 69.941 para el departamento de Caldas y 32.628 invertidos para la construcción del tejido social de la población víctima en el Quindío, según las cifras de la oficina asesora de planeación, en sus estadísticas departamentales.
La Unidad ha transferido 9.144 millones de pesos en lo que va corrido del año por concepto de Atención Humanitaria en los tres departamentos, para solucionar los inconvenientes en momentos de emergencia y transición.
Este año hemos destinado más de 12.000 millones de pesos para el componente de indemnizaciones, tanto para las víctimas del desplazamiento forzado, como de otros hechos victimizantes. Recordemos que el 76% de las víctimas de esta parte del país corresponden a personas que han padecido de desplazamiento forzado.
En Risaralda se han destinado un total de 6.459 millones de pesos para indemnizar a las víctimas, 5.243 millones correspondieron a las víctimas de hechos diferentes al desplazamiento.
En Caldas la cifra de indemnizaciones ascendió a 4.106 millones de pesos que beneficiaron un total de 440 víctimas.
En Quindío las indemnizaciones suman 1.588 millones de pesos, 1.464 de estos amparan las víctimas de hechos diferentes al desplazamiento.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que todos estos indicadores han aumentado en el último mes, ya que se han realizado jornadas masivas de entrega de cartas de indemnización, no contabilizadas por el departamento de planeación de la entidad hasta el momento.
El número de víctimas en la zona cafetera llegó a 270.307; de este universo 107.013 son declaraciones en Risaralda, 106.337 en Caldas y 56.957 en Quindío, la Unidad registró como sujetos de atención y reparación 220.169 personas.
En el punto de atención de la capital quindiana se atendieron a septiembre de 2015, 27.285 víctimas, en Caldas 31.973 y en Risaralda 54.341, para un total de 113.599 personas atendidas, pero allí no para la atención de la entidad, ya que este año se han desarrollado un total de 75 jornadas móviles en 36 de los 53 municipios del Eje Cafetero, logrando una cobertura de casi el 70%. En total se atendieron durante estas jornadas por parte de los orientadores y los enlaces integrales 9.680 víctimas.
En el Eje Cafetero, gracias a la articulación que ha tenido la Unidad con las administraciones locales seguimos ampliando el número de puntos de atención, actualmente contamos con 8. 4 de ellos en Risaralda (Pereira, Dosquebradas, Santa Rosa, Apía), 3 en Caldas (Manizales, La Dorada, Samaná) y 1 en Quindío (Armenia).
En la medida en que los presupuestos participativos asignados por las administraciones locales lo permitan, la Unidad aspira a continuar ampliando nuestros puntos de atención en los tres departamentos.
De igual forma, la entidad ha tratado de dar una cobertura homogénea en cuanto a la atención y asistencia en los tres departamentos, formulando el PAARI (Plan de Atención y Asistencia para la Reparación Integral), momento de asistencia a un total de 13.508 víctimas.
En cuanto al componente de reparación colectiva, actualmente se adelantan 14 intervenciones a través de las cuales se han desarrollado proyectos productivos y obras de infraestructura.
Los municipios objeto de dicha intervención son en Caldas: Anserma, Belalcázar, Supía, Viterbo, Samaná. En Risaralda: Apía, Quinchía, Santuario, Marsella y en Quindío: Córdoba, Génova, Montenegro, Circasia y La Tebaida. Allí se están ejecutando iniciativas como la implementación de cultivos de café, plátano, mora, maíz, frijol, tomate chonto y ahuyama; de igual manera transformación de guadua (artesanía), gallinas ponedoras, piscicultura, ganadería, confecciones, papelería y panadería.
Otro de los componentes desarrollados en este sentido es el de la empleabilidad de infraestructura técnica y social, en dicho sentido también se han adelantado procesos como: adecuación de auditorios, entrega de silletería, mejoramiento de unidades deportivas o recreativas, casetas comunales, construcción de alcantarillados, placas huellas, adecuación de parques infantiles y gimnasios comunitarios al aire libre y construcción de centros comunales de acopio u depósitos.
Dentro de estos proyectos productivos y obras de infraestructura la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas realiza un aporte de 1.294 millones de pesos, 670 millones en obras y 624 en proyectos productivos.
En 2015 un total de 7.712.014 personas habían sido reconocidas como víctimas del conflicto armado en nuestro país, desde la promulgación de la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras en el año 2011, el camino para lograr este reconocimiento no ha sido nada fácil.
La política de víctimas del actual gobierno es uno de los pilares fundamentales para la construcción de una paz estable y duradera. Lo ha manifestado el Presidente Juan Manuel Santos “Estamos muy cerca de lograr la paz” y precisamente uno de los caminos que nos ayuda a lograr estos objetivos es dar a conocer a la ciudadanía el balance de los resultados alcanzados en el presente año.
El objetivo principal de la rendición de cuentas es facilitar la transparencia, generar condiciones de confianza y garantizar el ejercicio de control social a la administración pública.