432 familias víctimas en Santander recibirán $2.431 millones para proyectos productivos
El proyecto viene acompañado de la implementación de la Estrategia de Recuperación Emocional que busca facilitar herramientas a los sobrevivientes del conflicto armado, para ayudarles a superar el dolor sufrido por la guerra que tuvieron que padecer por tanto tiempo.
La vida de 432 familias santandereanas víctimas del conflicto armado de 21 municipios del departamento será diferente toda vez que la Unidad para las Víctimas territorial Santander, en cabeza de Luis Alfonso Aparicio Reyes, gestionó mediante el mecanismo de cofinanciación del banco de proyectos de la Unidad en articulación con el Sena y los municipios, $2.431 millones para que estas familias desarrollen igual número de proyectos productivos en áreas como: ganadería, agricultura, comercio, comidas rápidas, talleres, salones de belleza, entre otros.
En 2016, serán 21 municipios los beneficiarios de estos proyectos: Onzaga, San Joaquín, Valle de San José, Ocamonte, Coromoro, Charalá, Encino, Tona, Guaca, San Andrés, Betulia, San Vicente de Chucurí, Santa Helena del Opón, Vélez, Aguada, Chima, Hato, Guacamayo, Palmas del Socorro, Aratoca y Los Santos.
Del mismo modo, el proyecto viene acompañado de la implementación de la Estrategia de Recuperación Emocional que busca facilitar herramientas a los sobrevivientes del conflicto armado, para ayudarles a superar el dolor sufrido por la guerra que tuvieron que padecer por tanto tiempo.
“Este proyecto de mecanismo de cofinanciación, es una gran apuesta de la Unidad para las Víctimas que pretende generar un impacto en la provincia con el propósito de construir paz desde el territorio y sobre todo desde los municipios más apartados y pobres de nuestro país”, manifestó Luis Alfonso Aparicio Reyes, director territorial de la Unidad para las Víctimas.
Hernán Eduardo Sanabria, alcalde de Onzaga, destacó que “las familias de los 21 municipios que hacen parte del convenio tienen la posibilidad de mejorar sus ingresos, calidad de vida y generación de empleo a través de los diferentes proyectos productivos en los cuales va a trabajar cada municipio; es un modelo que tendrá gran impacto a nivel nacional, por cuanto beneficia a municipios de sexta categoría”.
De este modo, la Unidad para las Víctimas le devuelve la esperanza a las víctimas del conflicto armado y les da la posibilidad de crecer en diferentes áreas productivas que le permitan hacer realidad su proyecto de vida en beneficio de todas sus familias.